30 Día 14 de julio Un día precioso y completo, después de Belgrado vamos a Smederevo a unos 45 kilómetros de Belgrado, a orillas del Danubio, tiene una fortaleza que es la más grande de Serbia bastante conservada, permaneció tres siglos en manos otomanas. Lo realmente increíble y maravilloso es la iglesia de San Jorge, por fuera es una belleza barroca, con dos torres pero lo grandioso es su interior, con joyas de la iglesia ortodoxa tales como un iconostasio de vivos colores y tema clásico, muchos dorados y pinturas murales, pero es grandiosa, descomunal, el tejado exterior es llamativo por el bronce empleado en su construcción. Mas tarde a Oplenat, ubicado en una colina de la provincia de Sumadita, allí se gestó el germen de rebelión contra el imperio otomano siendo la partida para la creación de un nuevo país. La iglesia de San Jorge, santo muy venerado en estos lares, guarda un patrimonio único ,es un mausoleo impresionante de mármol blanco, donde están enterrados los miembros de la dinastía Karadjordievic, sus mosaicos tienen mas de 15.000 colores distintos, reproduciendo escenas de varios monasterios de Serbia. Nos dirigimos para ver, y vemos el precioso monasterio de Ravanica, un monasterio situado a 11 kilometros de la ciudad de Cuprija, construido por el príncipe Lazar y cuenta la historia que la esposa de este, la princesa Milita le aconsejó construirán monasterio para la salvación de su alma, El príncipe Lazar es el mito, para Serbia ,este pensó construir un lujosísimo monasterio, pero como los turcos ya estaban dando por saco ,su cuñado le aconsejó ,menos lujo y construir una obra mas sólida ,por ello ,se construyó en piedra, con murallas y siete torres, Lazar muere en la batalla de Kosovo y nace asi el mayor mito Serbio, al final lo santifican y sus cenizas se depositan en Ravanica, los turcos invaden la zona y los monjes huyen llevándose las cenizas de Lazar a Hungria , en 1670,después de vagar varios siglos de aquí para allá en 1989 después de los 600 años de la batalla de Kosovo, sus cenizas regresan a Ravanica ,convirtiéndose en un acontecimiento nacional En cuanto al edificio, fue destruido y restaurado varias veces, tiene frescos bastante bien conservados de tipo bizantino ,que una joven y sociable monja ,nos enseña y deja fotografiar ,cosa bastante mal hecha por nuestra parte, se llega desviándonos de la carretera principal, consejo, no os perdía ninguna de las tres cosas que hemos visto, llegamos a Nis y como ya lo conocíamos continuamos por la carretera nacional que lleva a Macedonia,
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