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Hemos terminado de cruzar el dique, que por cierto son 30
Km. Dicen los expertos que es una de las mayores obras de
ingeniería de su época.
Después hemos ido a
Giethoorn
, ya bajando por la parte
izquierda del gran dique ( nos pillaba un poco lejos pero ha
merecido la pena) parece un pueblo de cuento, buenas casas
todas ellas de planta baja y con el techo de paja, construidas
en islitas que son praderas verdes entre canales, a las cuales
se accede mediante puentes y por embarcadero, la visita se
puede hacer lo mismo, viéndolo desde las calles y los puentes
o bien alquilando una barquita y viéndolo desde los canales,
nosotros lo vimos paseando, pero con niños la opción de la
barca seguro que es mas atractiva para ellos.