Hola:
Quiero aportar mi opinión a este hilo. Personalmente creo que dentro de las personas que están fijos en un camping, no es tanta la diferencia en el habitáculo que utilicen, caravana, caravana de dos ejes, mobil-home, etc sino la actitud.
Yo he estado en campings donde la presencia de fijos no es algo que te llame la atención, a no ser porque tienen un prado que cuidan, riegan y tienen segadora y a ti el prado de tu parcela te la trae al fresco. Pero hacen vida fuera, como los “no fijos”, comen, juegan a las cartas, etc, y quizás te dan un poco de envidia cuando está diluviando y en el mobil-home están tirados en el sofá a pierna suelta, porque no cierran las puertas, ni tienen las cortinas siempre cerradas y se relacionan con los vecinos no fijos puesto que no están todos en una esquina.
Pero también he estado en algún otro sitio donde la sensación que te dan los fijos no es tan agradable. Donde para la limitación de las parcelas ponen un palo y uno aparca pegadito, rozando las ruedas con el palo, sin darse cuenta de que su vecino es algo mejor que él, pues su espejo retrovisor no pliega y por lo tanto está “invadiendo” la parcela del vecino. También se delimitan las parcelas por macetas ya que no permiten setos, así que dos parcelas contiguas tienen una fila de macro-macetas (con arbustos), tocándose entre sí por si al vecino se le ocurre pasarse un centímetro de su espacio. Las macetas pueden ser sustituidas por enanitos o similar. En este sitio lo que esperas es una discusión de “patio de luces” pero en vez de a través de la ventana de la cocina, a ambos lados de las macetas. Realmente la sensación de “poblado” es alta.
Y el peor tipo de todos bajo mi punto de vista son esos campings donde permiten que los fijos, se crean que tienen un chalet en la sierra o en la playa con finca de 80 metros cuadrados, que limitan por setos, y donde como quieren intimidad, llenan de plásticos laterales, que impiden tener acceso visual al interior de la parcela y que la sensación que dan es de chavola, aunque con verja en lo que ellos consideran es la entrada de “su casa”. En muchos casos las caravanas que utilizan están demasiado viejas e incluso con cinta aislante por las juntas que no se molestan en que sea blanca sino negra y que junto con la acumulación de plásticos producen un “impacto visual” que habría que pensar si podría llegar a ser “un delito contra el campismo”, bueno esto es un poco extremo pero realmente es lo que te pasa por la cabeza. Quiero dejar claro que en mi opinión, en un camping la falta de intimidad “en tu jardín” o sobre la hora a la que vas al baño, tiene que estar asumida, o así lo veo yo y no puedes evitarlo haciendo una chavola de plásticos o no se debería, porque poder está claro que se puede.
La intención de toda esta parrafada es señalar de nuevo que es la actitud lo que crea perjuicios pues si sólo conoces a los últimos dos tipos de los que yo hablo, te harás una idea de lo que son “los fijos” que no tiene por qué representar a todos ellos.
Yo tengo que decir que por suerte, conocí antes a los primeros, a los casi no diferenciables y fue una sorpresa descubrir los otros dos tipos y entender entonces por qué se criticaba a un subgrupo de campistas, que era las personas que no varían de camping a lo largo del año o de los años y que hasta ese momento yo consideraba personas encantadoras no distintas del resto con excepciones pero al igual que dentro del grupo de “acampo una noche y sigo”.