Sólo conozco el Madalena. Estuve el año pasado en pleno agosto y ningún problema para coger sitio sin reserva, el camping es enorme. No tiene parcelas, plantas donde más te guste, aunque al entrar te dicen la zona donde debes ir más o menos (no vi que nadie hicera mucho caso). Los servicios son un poco antiguos pero estaban bastante limpios. La piscina es estupenda, la cafetería está bien, y tiene una terraza sobre ella muy apañada. La recepción está muy cuidada, a veces se forman colas bastante grandes, pero son amables. También hay un minimarket, bastante pequeño pero que tiene lo básico. La playa está a 500 metros. Tiene pistas de tenis y lavacoches. En general, a mi me gustó bastante.