ferpoza
hablador
Hola:
Abro este hilo para poner la ruta que hicimos englobada en la III Webcampada de las Iruelas, organizada por D. Andarín y en la que participamos un buen puñado de los asistentes. Empiezo yo con mis fotos, y luego seguro que Pica, y demás asistentes, ponen las suyas, que ya he visto alguna y merecen mucho la pena.
El recorrido empieza en uno de los aparcamientos del Castañar de El Tiemblo, al que accedimos en coche.
Empezando la Ruta. Desde el Aparcamiento vamos subiendo por un sendero-pista forestal que gana una buena pendiente enseguida:
Lo bueno es que nos hizo un tiempo de p. m. sobre todo pensando que estamos ya en noviembre... y lo malo es que al no haber hecho frío, el castañar no ha entrado en el otoño de lleno, lo que nos ha privado de los colores otoñales que disfrutamos el año pasado:
Entre los pinos, empieza a aparecer nuestro destino, el Pico de Casillas:
Y al ir tomando altura, la vegetación arbórea, va desapareciendo, con lo que queda al descubierto prácticamente toda la ruta a seguir:
El ambiente, como siempre, ha sido relajado y con risas... y el tiempo, totalmente despejado...
Una vista hacia nuestra espalda, nos enseña el desnivel ya subido y el castañar todavía verde:
La ruta es fácil y bonita, pero de vez en cuando, intercala alguna rampa con una inclinación matadora:
Abro este hilo para poner la ruta que hicimos englobada en la III Webcampada de las Iruelas, organizada por D. Andarín y en la que participamos un buen puñado de los asistentes. Empiezo yo con mis fotos, y luego seguro que Pica, y demás asistentes, ponen las suyas, que ya he visto alguna y merecen mucho la pena.
El recorrido empieza en uno de los aparcamientos del Castañar de El Tiemblo, al que accedimos en coche.
Empezando la Ruta. Desde el Aparcamiento vamos subiendo por un sendero-pista forestal que gana una buena pendiente enseguida:
Lo bueno es que nos hizo un tiempo de p. m. sobre todo pensando que estamos ya en noviembre... y lo malo es que al no haber hecho frío, el castañar no ha entrado en el otoño de lleno, lo que nos ha privado de los colores otoñales que disfrutamos el año pasado:
Entre los pinos, empieza a aparecer nuestro destino, el Pico de Casillas:
Y al ir tomando altura, la vegetación arbórea, va desapareciendo, con lo que queda al descubierto prácticamente toda la ruta a seguir:
El ambiente, como siempre, ha sido relajado y con risas... y el tiempo, totalmente despejado...
Una vista hacia nuestra espalda, nos enseña el desnivel ya subido y el castañar todavía verde:
La ruta es fácil y bonita, pero de vez en cuando, intercala alguna rampa con una inclinación matadora: