Un recorrido por la memoria

Francia, Luxemburgo y Bélgica, un recorrido por la memoria 21 Turismo Zarauz, desde que la reina Isabel II de España lo eligiera como lugar de veraneo (Palacio de Narros) ha ido creciendo como ciudad turística. Tras Isabel II fueron muchos los aristócratas y gentes de clase alta, que comenzaron a pasar los meses de verano en Zarauz: el Marqués de Narros, la Reina María Cristina, el Rey Alfonso XIII, Balduino de Bélgica, la Duquesa de Alba o don Pascual Madoz entre otros. Los aristócratas que veraneaban en Zarauz a primeros de siglo eran pocos, pero atrajeron a otros. De este modo, destacados nobles empezaron a visitar la villa, encontrando en ella grandes atractivos: su belleza, la proximidad de San Sebastián, ciudad de veraneo de la corte; la cercanía de Biarritz, frecuentado por los elegantes etc. La aristocracia se hospedó en el "Gran Hotel" (hoy en día desaparecido) y comenzaron a construir sus villas, hicieron el golf y toda la infraestructura social y festiva que su largo veraneo requería. Estas familias venían a Zarauz acompañadas de todo un séquito a su servicio, al que hay que añadir a los que contrataban del pueblo. La señora tenía su doncella particular, el señor su ayuda de cámara. Cada dormitorio de los hijos o bien disponía de doncella propia o bien había dos o tres para toda la casa. Estas se repartían el cuidado de la puerta, del teléfono, limpiaban la plata y las habitaciones. Disponían de mozo de comedor, cocinero y pinche. Si los hijos eran pequeños los atendían tres señoritas: madeimoselle, miss, y Froilán, que se encargaban también de su educación; lo que en otras familias hacía un preceptor. Añádase el chofer y el lacayo. A esta lista incorporaban en Zarauz a la lavandera, planchadora y pinche de cocina. El jardinero y su familia se encargaban del cuidado de la casa durante todo el año, hacían los colchones al estilo inglés y preparaban la villa cuando venían los señores. Se podría pensar que no trabajaban demasiado siendo tanto el servicio; nada más lejos de la realidad. Se trataba de grandes casas con familias numerosas a las que se añadían muchos invitados. Hubo alguna villa en la que se juntaban de setenta a noventa personas. Vista de Zarauz desde el monte Santa Bárbara. Con los años, el concepto de veraneo fue cambiando dando paso a un municipio que ha ido creciendo constantemente tanto en edificaciones como en habitantes. Hoy en día, la ciudad es el más importante centro de atracción del turismo del País Vasco, junto con Bilbao y San Sebastián. Su playa, la más extensa del País Vasco con casi 3 kilómetros, atrae sobre todo en época estival a miles de turistas y surfistas. En septiembre, se celebra el Campeonato Rip Curl Pro Zarautz, puntuable para el mundial de surf. A pie de playa, colindante con la zona denominada Desertu Txikia ("desierto pequeño" en euskera), se encuentra el Hotel Restaurante Karlos Arguiñano. Justamente es éste antiguo palacete junto con la villa familiar restaurada en hotel con encanto, hotel Roca Mollarri y el hotel Zarauz, los tres lugares de mayor solera de la ciudad balnearia que guardan el lustre de otros tiempos. Actualmente, Zarauz, durante el verano, se convierte en la segunda ciudad de Guipúzcoa en número de habitantes tras su capital, San Sebastián.

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