Francia, Luxemburgo y Bélgica, un recorrido por la memoria 235 El ala llamada «de Carlos VIII», también de estilo gótico tardío, que comprende las viviendas del Rey y de la Reina. El ala Luis XII, de estilo renacentista. Dos grandes torres circulares: des Minimes y de Hurtault con rampas cubiertas en forma de caracol que permiten el acceso fácil de los caballos y de las carretas desde el nivel del Loira hasta la cota del castillo, esto es, a unos 200 metros. Sobre la terraza, existe un parque donde se encuantra un busto de Leonardo da Vinci y un memorial de Abd al-Qadir, fallecido en Amboise durante su cautividad. Carlos VIII murió allí el 7 de abril de 1498 a la edad de 28 años, después de haberse golpeado en la cabeza con el dintel de una puerta, en el foso del castillo, mientras jugaba al Jeu de Paume. Luis XII hizo construir una segunda ala, perpendicular al ala Carlos VIII, en estilo Renacimiento. Francisco I pasó allí su infancia y reordenó el ala Luis XII. Invitó a Leonardo da Vinci, que permaneció en Amboise, en el llamado Castillo de Clos-Lucé, una mansión situada cerca del castillo, desde 1516 hasta su muerte el 2 de mayo de 1519. Se construyó un pasaje subterráneo, permitiendo la comunicación entre ambas sitios. El gran pintor fue inhumado en la capilla de San Huberto. El castillo fue el teatro de la conjura de Amboise en 1560, preludio de las guerras de religión. A partir de Enrique III, las estancias reales se hicieron más escasas. Una gran parte del castillo fue demolida en el mismo reinado de Enrique III. Luis Felipe I heredó el castillo de su madre. Remodeló las antiguas murallas haciendo destruir las casas contiguas y redecoró el ala Luis XII. En 1847, el emir Abd al-Qadir, jefe de la lucha contra la colonización francesa en Argelia, se rinde ante las autoridades francesas, y en 1848 es encarcelado en el castillo, hasta que en 1852 Napoleón III le concede la libertad. Amboise : La opinión de Michelin La hermosa ciudad de Amboise, desplegada a lo largo de la orilla izquierda del Loira, guarda el recuerdo de ilustres personajes. En el castillo que se alza por encima de la ciudad y el río vivieron Luis XI, Carlos VIII y Francisco I. Este admirable edificio, inspirado en el arte italiano de principios del Renacimiento, es una de las más suntuosas mansiones reales del valle del Loira. No lejos de aquí, el castillo del Clos-Lucé honra la memoria de Leonardo da Vinci, que pasó en él sus últimos años de vida. Clos-Lucé Residencia de verano escogida por Carlos VIII para su mujer Ana de Bretaña, en el Clos-Lucé se instaló Leonardo da Vinci en 1516. En la planta baja se encuentran magníficos frescos del taller del maestro (recubiertos de un enlucido del s. XIX). El primer piso alberga la habitación donde murió en 1519 así como un gabinete de trabajo. Finalmente, en el sótano, máquinas extraordinarias demuestran hasta qué punto Leonardo da Vinci estaba adelantado a su tiempo. Tour de l'Horloge Erigida en el s. XV, y también llamada la atalaya de Amboise, se alza por encima de una animada calle peatonal llena de encanto, con numerosas tiendas de recuerdos, cafés y comercios de todo tipo.
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