El cocodrilo nunca tuvo un Subaru. Vamos por partes:
1.- Si dos motores tienen los mismos caballos proporcionan el mismo rendimiento sin perjuicio de si es gasolina o gasóleo.
2.- Los motores diesel entregan la potencia a menos revoluciones que los de gasóleo.
3.- Los motores diesel son más perezosos en alcanzar la velocidad de crucero.
4.- Alcanzada la velocidad de crucero, se comportan igual que uno de gasolina.
5.- La mayor parte de los kilómetros que andamos, lo son por rutas de autopista y autovía, donde salvo para ciertas rampas, nunca llevamos el motor a pleno rendimiento. O sea: si disponemos de 150 caballos que nos permitirían rozar los 200 por hora, utilizamos 60 ó 70 que nos permiten ir a 140 (que dicen que es la tolerancia de los radares). En caso de remolcar caravana, llaneamos a 90 ó 100 (allá cada cual si va más deprisa) y utilizamos 80 caballos de los 150 disponibles.
6.- El conductor que va pendiente del cuenta vueltas, hace mal: hay que ir pendientes de la carretera y del velocímetro para no pasarse y pillar y una sanción. No acabo de comprender a quienes arriesgan vidas remolcando caravanas a velocidades críticas, exponiéndose a una sanción que, si se produce, transforma el consumo de un 10% a un 50%. Entonces ¿de que carallo hablamos cuando nos referimos a si necesitamos 5.000 vueltas para subir una rampa?
7.- Mi coche es un Citroen c-2 gasolina, 110 cv. Cambio automático. Su ficha me autoriza a remolcar una caravana de 565 kg máximo. La caravana es una Roller Aloha de ocasión (muy buen estado) que pesa en ficha 530 aunque sospecho que pesa bastante más, pero a efectos administrativos voy dentro de la norma. Con este conjunto voy sin mayores problemas y, salvo en las rampas muy duras de autopista, subo a 80 y 90 en la 5ª y excepcionalmente, en la 4ª. Esto quiere decir que jamás necesito subir el régimen de revoluciones a tope. En carreteras convencionales y en montaña, no hay más remedio que ir despacio y salir de las curvas en marchas cortas. Esto me pasa a mi y a todos, sea el coche que sea.
8.- Intuyo que en no muy largo plazo, el gasóleo y la gasolina andarán a la par en precio. Los profesionales del taxi y transporte, recibirán alguna ayuda. El resto de los cristianos pasaremos por taquilla. Así que, con par máximo aquí o allí, desplazarse empieza a ser lujazo, y en algunos casos una frivolité.
En resumen: A quien le guste un Subaru a gasolina, y encima, como segundo coche para remolcar la caravana, o sea: que tiene el riñón bien cubierto y no como yo que soy un puto anciano desamparao del inserso, que se lo compre sin preocuparse si el par máximo lo da a 5.000 ó a 3.500 rvpm. En ciertos niveles de precio, confort y potencia, todos los coches son excelentes… incluyo el de Pandiani que es una cabeza tractora.
Me voy de acampada que aquí rompió la primavera mientras en Sevilla se inunda tó. ¡Manda carallo: Andalucía es una realidad nacional y su capital, por lo que estaba cayendo el otro día, SANTIAGO!
Cordiales debates.-
