UN BUEN VENDEDOR
 
   En el Corte Inglés de Jerez, había un vendedor que era conocido  en  
   la zona por una pericia inusitada en el instante de la venta.
   Un día, el gerente de la Oficina de El Corte Inglés de Serrano,  en 
   Madrid, requirió sus servicios para fomentar la venta en uno de  sus 
   departamentos menos explotados: el de Caza y Pesca.
   En su primer día, el gerente quiso comprobar in situ cómo aquel 
   supuesto “monstruo andaluz de las ventas", conseguía encasquetar  alguna
   cosa.
   Vio al hombre ocupado con un cliente y acudió al lugar intentando  pasar
   desapercibido, mirando diversos artículos y escuchando,  discretamente, la
   conversación:
   - Sí señor, una buena caña. Pero, permítame, usted es un hombre  de 
  gran fortaleza física y quizá ésta no le de suficiente  rendimiento  si 
  pesca una pieza grande, pongamos por caso una lubina o un  pulpo.  Le 
  sugiero mejor una de estas que nos acaban de llegar de  Australia.  
  Pura caña de bambú, reformateada.
   - No se yo...
   - ¡No se hable más! Además, piense en sus compañeros de oficina;  
 los va a dejar alucinados. Debería usted llevarse una Polaroid y  hacerse  
 una foto con la pieza más grande que consiga. ¡Va a ser usted la  
 envidia del Departamento!
   - Hombre, nunca se me dio mal ...
   - Claro que una buena caña no es nada sin un buen carrete. Y en 
carretes, sólo lo mejor de lo mejor. Mire éste: japonés, lo  último,  
300 metros de hilo  doble resistencia, posibilidad de tres bloqueos. Y 
si se lleva  hoy  este modelo -entre usted y yo, ¡por sólo  250 euros!, 
lo que es toda una ganga- le regalamos un juego de plomos.
   - Sí que parece un buen carrete, sí...
   - ¿Buen carrete? Mire yo con uno de éstos pesqué el verano pasado  
en Barbate un atún de 7 kilos. ¡Una maravilla! Claro, que fue mar  
adentro; porque las piezas buenas solo se pescan mar adentro. Me 
refiero a  que a la playa no van a venir ellas solitas ¿me entiende usted?
  - Si, claro. Entonces...
  - Una zodiac es la mejor opción. Ahora, precisamente, tenemos  aquí  
 en la sección de al lado una que estaba de muestra y le saldrá 
 tirada, oiga. ¡Tirada!
  - Bueno yo tampoco pensaba en ...
  - ¿Pero usted qué quiere? ¿Pescar o ir de tiendas? Las cosas o se  
 Hacen bien o no se hacen. Y usted es una persona que sabe como se  hacen las 
cosas. Lo supe desde que le vi.
   - Bueno, la verdad es que, hace dos años, fui administrativo del  mes  y...
   - ¿Qué le dije? Es usted un hombre que ha nacido para ganar.  
¿Quiere pescar?  Pescará. ¡Vaya si pescará! Claro que la zodiac 
necesita un motor, y  el mercado de segunda mano no merece la pena, ya sabe ...  
importación paralela, sin papeles, vamos que le meten unos pufos  por  
ahí. Déjese, que tenemos un modelo Yamaha por 1.000 euros, que no  se  lo podrá creer. Qué sensación de libertad. El aire en la cara, las olas  salpicando ... no sigo, no sigo porque ¡me está usted dando una envidia!
   - Lo de la barca no es mala idea, ¿pero cómo la llevo?
   - Si quiere buscar excusas búsquelas. Y si lo que quiere es 
disfrutar busque soluciones.  Usted no va sólo a pescar. Usted va  a  
pasar unos días en contacto con la naturaleza, a encontrarse a sí mismo. No le creo tan ignorante como para pasar tres noches en  uno  de esos hoteles para 
aficionados. Usted lo que necesita es una  caravana. Además, no es 
necesario  que sea muy grande. Con una cuatro plazas tiene de sobra, y 
así resuelve el problema de la zodiac. Podrá llevarla arriba. ¡No  sabe  el 
dineral que se va a ahorrar en hoteles! Además de inteligente,  creo 
que es usted un hombre de suerte.
   - Bueno yo siempre me distinguí por ser una persona responsable y con iniciativa ...
   - Bueno, eso se ve. Bien, señor, ya se lo he preparado todo: será la 
caña, el carrete (con los plomos de regalo), la Polaroid, la  zodiac,  
el fueraborda, la caravana y el juego completo de aparejos de  pesca  
de bajura. Total ... 8.750 euros, que podrá pagar en tres cómodos  plazos.
Mire, firme aquí ... Eso es. Muchas gracias. Encantado.¡Y  que tenga 
usted una  buena pesca ...!
 
   El gerente madrileño se acerca alucinado al vendedor, con los  ojos 
  que se le salían de las órbitas.
   - Me ha dejado usted boquiabierto. ¡Qué seguridad!, ¡Qué 
  psicología!,¡Qué dominio de la materia! Es usted, sencillamente, 
  impresionante. No he visto en mi vida un caso igual: ¡un tío que venía 
  a comprar una caña de pescar, y le ha vendido usted medio departamento!
   - ¿Una caña? No, no. Se equivoca. Ese señor no venía a comprar  una 
 caña. Lo que ha ocurrido es que me lo he encontrado en las  escaleras  
 y me ha preguntado que dónde podría comprar unos Tampax, y yo le he dicho: 
"Pero hombre de Dios, ¿va a pasar cinco días sin follar y no va a aprovechar 
Para ir de pesca ...?".