Bueno, hubo que ayudarse entre todos. Si no tenías pico y pala, funcionan muy bien las tapas de las tarteras. Además, poniendo la calefacción fuerte toda la noche, se consigue separar la nieve de la caravana, como veis en las fotos.
La unica pega , de verdad, es que no se pudo sacar la caravana hasta unas semanas después, cuando cedió la nieve. ¡ Hay que estar preparados para todo, , en este maravilloso mundo del caravananismo !. Sino, ¿como iba a pasar uno estas aventuras , eh! ? , ... algo habrá que contarle a los nietos.
Saludos acatarrados, familia.