- En una encuesta laboral les preguntan: ¿Usted, ¿A qué se dedica? - Por la mañana no hago nada y por la tarde duermo la siesta. - Y ¿Usted? - Soy su ayudante.

- Papá, ¿cómo supiste que mamá era la mujer de tu vida? - Porque no se va.

- Cariño, hace mucho que no hablamos. - Y ya lo has estropeado.

- ¿Por qué te llaman "el espabilao" así, con cachondeito? - Me saqué el carné a la tercera. - Tampoco es para tanto. - El de identidad.

- Abuelo, tú que tienes años y experiencia, si estuvieras en el colegio en una clase de sexo, ¿qué nota sacarías? - Y ¿tú? - Pues yo un diez. - Que tonto eres hijo, yo sacaría un cuatro para repetir en septiembre.

- Aquí le traigo su agua con gas fresquita. Por cierto, ¿de dónde eres preciosidad? - "Otawa". - Otra agua, pues ahora se la traigo, pero vamos por el acento tiene que ser de Málaga, ¿no?

- Me acabo de probar la ropa de playa - Y ¿qué tal? - Solo me queda bien la toalla.

- ¿Sabes que Patxi e Iratxe han sido padres de una niña que se llama Rocío? - ¿Rocío? Que nombre más poco vasco. - Sí, pero dicen que en casa la van a llamar Escartxa.

- Cariño, tengo que decirte una cosa. - Yo también. - Venga los dos a la vez. Uno, dos y tres. - Mi prima es un tío. - Me he follado a tu pri... ¿Qué?

- Entra un señor en la morgue para identificar el cadáver y al ver el cuerpo empieza a llorar y exclama no, no, no. - El empleado al verle le dice, ustedes eran unas personas que se querían mucho. - No, no. Nos odiábamos. - Entonces ¿por qué llora tanto? - Porque no es ella.

- En las noticias de televisión le preguntan al marido: ¿quiere decirles algo a los secuestradores de su mujer? - Sí. - Mire a la cámara y hable: ¡cabrones, os habéis dejado aquí a su madre!

- ¿Sabes la diferencia entre noviazgo y matrimonio? - No, ¿cuál es? - Que las mariposas se convierten en gases.

- Tiene una enfermedad grave. - Dos mío, ¡voy a morir! - No se preocupe, se cura comiendo sano y haciendo ejercicio. - ¡Dos mío!¡Voy a morir!

- ¿Qué te pasa? - Estoy enfadado porque las paredes que hacen en los pisos son una mierda. Ayer con voz alta le dije a mi esposa "quiero hacer el amor" y tres vecinas contestaron, ¡me duele la cabeza

- Te veo preocupado, ¿qué te pasa? - Mi mujer, que salió sin paraguas y está lloviendo. - Tranquilo, seguro que se mete en alguna tienda. - Eso es lo que me preocupa.

- Cariño, cada vez la ropa me queda más pequeña y la culpa es de la lavadora. - No gordi, la culpa es del frigorífico.

- Que bonito es cuando sobran las palabras en una pareja. - ¿Por qué dices eso? - Porque con una mirada sabes que te quedas sin follar unos cuantos días.

- ¿Sólo la puntita? - No joven, ¡toda y sin piedad! - Señora, quiere corte de cabello ¿sí? o ¿no? - Ah sí, disculpa, es que me emocioné.

- Ella: tengo un cuadro de ansiedad. - Él: es uno de mis pintores favoritos.

- Me ha preguntado mi mujer que me pasa, le he contestado: "no sé, tu sabrás" y lo sabía.

- Papá, ¿qué es la calima? - Lo que tiene tu madre conmigo desde hace un año, "polvos en suspensión".

- Quillo, ¿como se dice "caja" en euskera? - ¡Kutxa! - ¡Dime!

- Papá, ¿qué es Arkansas? - La segunda persona del presente de indicativo del verbo "arcansar". - Gracias papi. - De nada hijo. Anda "arcánsame" una cerveza.

- ¡No puedo más! Solo se levanta del sofá para comer, cagar o hacer tonterías. - ¡Ya te dije que no te casaras con ese imbécil. - Mamá, estoy hablando del gato.

- Oye, para mi discutir con una mujer es como leer una licencia de software. - Sí y además terminas ignorando todo y aceptas los términos y condiciones.