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Presidente - Club Fendt Caravan España
Nos dejó Andoni, (Juan Antonio Velez de Mendizabal Villar) el gran Andoni, Un gran amigo, de gran estatura física, gran corazón y mejor persona. La vida no se lo puso fácil, aun así, siempre encontró la forma de regalar sonrisas y dar lo mejor de sí.
El destino, injusto e implacable, le reservó un final adverso, ese maldito destino contra el que no siempre podemos luchar. Pero lo que sí podemos hacer es recordarlo, honrar su memoria y seguir su ejemplo de bondad, generosidad y entrega. Su amistad nos marcó a todos y su huella permanecerá para siempre en nuestros corazones y en el seno del Club Fendt Caravan España.
La sospecha de que algo le había ocurrido y no precisamente bueno comenzó a tomar forma cuando unas semanas antes de la Fendtkdda 2025, no respondía a mis llamadas y no acudió a la Fendt-kdda, encuentro en el que él depositaba todo su entusiasmo y en el que siempre se encontraba tan a gusto simplemente siendo uno más. Hasta que llegaba el día de partir, siempre era el último en abandonar la Fendtkdda, como si algo en su interior condicionara su partida, y no quisiera volver a la rutina del día a día.
Me pongo a pensar y son muchos los recuerdo que caracterizan al gran Andoni, estando el grupo en animada charla en el camping Cañamares contemplando la adquisición de un nuevo vehículo por una de las asistentes, pregunte si era automático, siendo que sí, manifesté nunca he conducido un automático, allí apareció Andoni llaves en mano y ofreciéndome conducir su vehículo, que digo ofreciéndome, obligándome por más que dije que se trataba de una broma, no tuve opción más que conducir su vehículo automático por más de 50km. así era Antoni.
Aquel otro momento en el estando de visita por parque de fauna conocido como el Hosquillo en Cuenca, uno de los asistentes sufrió una lipotimia acompañada de temblores por hipotermia, allí estaba Andoni quitándose su cazadora y prestándosela a la persona en cuestión.
Mis recuerdos de las despedidas con Andoni son tristes. Me lleno de tristeza después de despedirnos con un abrazo, verlo correr en el camping de Coca detrás de mi coche y caravana, gritando repetidas veces y con la voz rota: "¡Agur, agur, aguuur!". Esos momentos convertidos en imágenes quedaron grabados en mi memoria, y su despedida siempre será un símbolo de su cariño y su espíritu.
En la Fendtkdda de 2024, la climatología convirtió el camping en un lodazal. Allí estaba Andoni, sin él y sin su ayuda, muchos de nosotros no habríamos podido salir del camping. Con su coche, uno a uno, fue sacando caravanas, ayudándonos a todos. Él se quedó el último en abandonar la Fendtkdda. Esa fue la última vez que nos abrazamos. Tras el abrazo recuerdo cómo inclinó su gran cuerpo hacia adelante, se agachó y, como si fuera un niño, se puso a llorar mientras repetía un y otra vez: "¡Sois mi familia!".
Su presencia, su amistad y su corazón seguirán vivos en quienes le conocimos y compartimos sus bromas y su recuerdo será siempre un faro que nos guíe y nos inspire a ser mejores.
¡¡GRANDE, ANDONI, GRANDE!! Allí donde estés no cambies.
Tu amigo Sebastián.
El destino, injusto e implacable, le reservó un final adverso, ese maldito destino contra el que no siempre podemos luchar. Pero lo que sí podemos hacer es recordarlo, honrar su memoria y seguir su ejemplo de bondad, generosidad y entrega. Su amistad nos marcó a todos y su huella permanecerá para siempre en nuestros corazones y en el seno del Club Fendt Caravan España.
La sospecha de que algo le había ocurrido y no precisamente bueno comenzó a tomar forma cuando unas semanas antes de la Fendtkdda 2025, no respondía a mis llamadas y no acudió a la Fendt-kdda, encuentro en el que él depositaba todo su entusiasmo y en el que siempre se encontraba tan a gusto simplemente siendo uno más. Hasta que llegaba el día de partir, siempre era el último en abandonar la Fendtkdda, como si algo en su interior condicionara su partida, y no quisiera volver a la rutina del día a día.
Me pongo a pensar y son muchos los recuerdo que caracterizan al gran Andoni, estando el grupo en animada charla en el camping Cañamares contemplando la adquisición de un nuevo vehículo por una de las asistentes, pregunte si era automático, siendo que sí, manifesté nunca he conducido un automático, allí apareció Andoni llaves en mano y ofreciéndome conducir su vehículo, que digo ofreciéndome, obligándome por más que dije que se trataba de una broma, no tuve opción más que conducir su vehículo automático por más de 50km. así era Antoni.
Aquel otro momento en el estando de visita por parque de fauna conocido como el Hosquillo en Cuenca, uno de los asistentes sufrió una lipotimia acompañada de temblores por hipotermia, allí estaba Andoni quitándose su cazadora y prestándosela a la persona en cuestión.
Mis recuerdos de las despedidas con Andoni son tristes. Me lleno de tristeza después de despedirnos con un abrazo, verlo correr en el camping de Coca detrás de mi coche y caravana, gritando repetidas veces y con la voz rota: "¡Agur, agur, aguuur!". Esos momentos convertidos en imágenes quedaron grabados en mi memoria, y su despedida siempre será un símbolo de su cariño y su espíritu.
En la Fendtkdda de 2024, la climatología convirtió el camping en un lodazal. Allí estaba Andoni, sin él y sin su ayuda, muchos de nosotros no habríamos podido salir del camping. Con su coche, uno a uno, fue sacando caravanas, ayudándonos a todos. Él se quedó el último en abandonar la Fendtkdda. Esa fue la última vez que nos abrazamos. Tras el abrazo recuerdo cómo inclinó su gran cuerpo hacia adelante, se agachó y, como si fuera un niño, se puso a llorar mientras repetía un y otra vez: "¡Sois mi familia!".
Su presencia, su amistad y su corazón seguirán vivos en quienes le conocimos y compartimos sus bromas y su recuerdo será siempre un faro que nos guíe y nos inspire a ser mejores.
¡¡GRANDE, ANDONI, GRANDE!! Allí donde estés no cambies.
Tu amigo Sebastián.
