Re: Contando anecdotas campistas...
Esta anécdonata la conocen algunos de los que están por aquí, pero como es un caso verídico, ahí va.
Corrían los años 70/72, niña de tres años

, niño de 1 año :brilsmurf y mi querida esposa :happy5: . Todo se veía de color de rosa y a pesar de que las infraestructuras de carreteras eran deficientes y con nuestro 850 Coupé

que se calentaba más que un soldado en Ibiza, nos pusimos en ruta hacia el levante Valenciano, nos cogió en la N-IV por delante un camión de cerdos ibéricos enjaulados y me duró la peste a guarrinos todo el mes de Julio, en fin que todo ello era como más romántico
Eran años difíciles, estábamos recién casados y con más trampas que la casa de un chino. Mi equipo de camping consistía en un coche usado Seat 850 Coupé ¡¡vamos una mierda!!, un carrito de 1,20 x 1,20 fabricado con estas manos que se comerán los gusanos si no me echan a la fogata antes, una tienda de campaña de segunda mano comprada a unos alemanes en Benidorm, tres sacos de dormir, una mesa, sillas y poco más :roll:
Hicimos los preparativos para un año más "aterrizar" en el Camping San Fernando de Oliva (VALENCIA) junto con mi hermano que fue el causante de haberme metido en este invento macabeo. Como la economía no estaba muy boyante que dijéramos, vamos que estábamos más tieso que una mohama, empezamos a marearnos la cabeza para pasar el mes de Julio lo más llevadero posible.
Entre otras lindezas que se nos había ocurrido llevar, la más "rentable" fue la compra de un queso tipo "El Cigarral", grande y cremoso envuelto en papel de celofán amarillo para que diera de sí, y es que los meses se hacían largos
Le digo a la parienta:
- Amelia que te parece si compramos un queso para llevarnos, ya sabes a los niños le gusta mucho ¿¿¿??? y es mu socorrío, además de unas latitas de conservas y otras "esquiseteses”. Con los avituallamientos correspondientes y la cartera más vacía que el pantano de "El Tranco" en época de sequía, vamos que íbamos bajo mínimos. Encarrilamos las pauperantes carreteras nacionales hasta el destino definitivo :angel9:
Legamos al camping a las 3 de la tarde, 39ºC, 87% de humedad y mi hermano esperándome en la parcela que me había guardado con mucha ilusión para no quedarme sin ella ¡¡que lástima!!., en el camping no había sombra ni dentro de recepción. Empezamos a sacar trastos del carrito y... !!Ameliaaaaaaaaa, ten cuidado que al queso no le vaya a dar el sol

, no se nos vaya a estropear y tengamos que irnos la semana que viene pa Sevilla!!!.
Comenzamos con el montaje de la tienda de dos dormitorios, salón y cortinitas ¡¡que mono!! :munky2: , ya sabéis un coñazo, yo chorreando en sudor, digo ¡¡niños coño dejar de coger los puñeteros tubos que me voy a volver loco!!!

Para colmo la niña decía ¡¡Papaaaaaa que me cago!! ¿qué te cagas? Yo si que me voy a cagar pero va a ser en la madre que te parió como no me dejes montar la jaima coño. En fin dos horas para dejarlo todo de la manera más "cómoda", se pasó la hora de la comida, eran las 5 de la tarde y aquí es donde se empezó a mascar la tragedia del queso. ¡¡¡ Ameliaaaaa, el queso lo ponemos en la mesita del "saloncito", tapadito y "fresquito"!!!, !!!jodeeeeerrrr, fresquito con 39ºC!!! :thefinger: :thefinger: .
Esa misma noche y para celebrar nuestra llegada preparamos una cena con mi hermano, mi cuñada, los niños y una tía tuerta con 80 años.
- !!!Ameliaaaaaa, pon un poquito de queso por favor, que tiene que estar de p... madre!!!. Se estrenó el queso cortándolo con mucho esmero para que durace todo el mes, era difícil hacer tantos juegos malabares pero no había más remedio si queríamos llegar a final de mes y volver al año siguiente de camping.
Al día siguiente, una vez más organizados, plantamos el queso en un plato grande y lo tapamos con un pañito, comimos queso durante unos cuantos días. Mi cuñada que como he dicho antes llevaba consigo una tía que era tuerta, nos dice:
¡¡Oye Eduardo que mi tía tiene un solo ojo y se lo tiene echao al queso

irate: , así que córtame unos trocitos para que lo pruebe y pueda mirar otra cosa. Los días iban transcurriendo y el queso dando de sí, pues las temperaturas de 38/40ºC dando en la tienda lo estaban hinchando. A mediados de mes y viendo que no se acababa el queso ni echándolo a los cochinos exclamo.. ¡¡Ameliaaaaaa que coño le pasa al queso que no se acaba!!

, ella decía: ¡¡¡ aquí está pasando algo raro¡¡¡, el queso está cogiendo un color tirando a tísico, pero está todavía de buen comer. Joder, esto es una mina exclamaba yo, si lo se le hubiese traído otro a mi hermano.
Fermenta un día y coge volumen, fermenta otro día y más volumen, el queso en vez de ir a menos iba a más, comíamos por la noche, al día siguiente el queso igual, comíamos al mediodía, al día siguiente igual de volumen. Mi cuñada decía: oye Eduardo ¿dónde has comprao ese queso?, la tuerta ya no le quitó el ojo de encima al queso hasta el final de las vacaciones, se puso morá de queso

. Así hasta casi al final de nuestras vacaciones y hasta los cojones de queso decidimos echárselo a los perros del camping. Os prometo que no sé si los perros también tuvieron sus raciones de queso para todo el mes de Agosto.
Y es que lo más rentable es llevarse un queso cremoso, de camping en tienda de campaña, al levante valenciano, en el mes de Julio y con 40ªC, es decir que para el que tenga 4 o 5 churumbeles le viene de **** madre, ¡¡vamos más que si lo invierte en bolsa!!!.