Estás utilizando un navegador obsoleto. Puede que este u otros sitios no se muestren correctamente. Debes actualizarlo o utilizar un navegador alternativo.
JOEEEEEEEEEL, nos referimos a que "Salte" cumplio al traernos el guante que arrojamos a su rostro.
El duelo fué en casa, pero tan rapido que no dio tiempo a que llegaran los testigos, por lo que no huvo sangre.
Un duelo que se precie debe durar hasta que uno de los dos caiga vencido pero "Salte" salió corriendo como alma que lleva el diablo. Como toda ceremonia, solo aceptó un cafetito y un refresco yanki.
Ya puede correr ya que no se librará de nuestra venganza. Despues de convencer al perro para que le cediera la caseta unos días, la desprecio olimpicamente (menos mal que ni la limpiamos).
Utilizamos cookies para ayudar a personalizar el contenido, adaptar la experiencia, y si estás registrado, a mantenerte conectado.
Al continuar utilizando este sitio, estás dando tu consentimiento a nuestra utilización de cookies.