Las parcelas del camping son una auténtica alfombra cuidada gracias a
las estrictas normas: la CV aquí mirando así, el coche aquí mirando “asá”, no
se pone cierre,…..
Es un buen camping pero sus baños no muy limpios y la actitud de
mucha gente de tienda que realmente con su actitud no campista lo hacen
desmerecer bastante.
Por la tarde visitamos
Utrecht
.
Estuvimos callejeando, merece la pena ver el Campanario y recorrer
sus calles y canales. Pudimos
ver un Festival Gótico, donde
todos los participantes se
encontraban vestidos de una
forma extrañamente llamativa.
Casi toda la zona
turística se centra a lo largo de
las muchas terrazas que
recorre el canal del centro de
la ciudad.
Día 10-11-(L-M):
Ámsterdam
Desde el Camping cogiendo la línea 53 de metro llegamos hasta la
Estación Central, punto de partida de la mayoría de líneas de tranvías.
Es una ciudad bulliciosa y uno de los primeros puntos culturales de
Europa donde todo tiene cabida (distintas razas, modas, religiones, eventos,
culturas, tendencias, se entremezclan y conviven en total armonía. Es un
verdadero placer andar cada una de sus preciosas calles para ver:
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Niew Markt
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Zuiderkerk
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Wagterloo-Plein
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Canal Amstel hasta cruzar puente Magere Brug: El puente elevadizo
es una preciosidad.