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VIAJE A ESLOVENIA Y CROACIA EN
CARAVANA 2009
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Aquí termina nuestro viaje a Croacia,
emprendiendo camino de nuevo hacia a Eslovenia,
para instalarnos en la ciudad de Velenje, dedicada a la
minería, donde pudimos visitar una mina que estaba al
lado mismo del camping. Desde Velenje
aprovechamos para visitar la capital Ljubljana. La
ciudad es más bien pequeña. Nosotros sólo dimos una
pequeña vuelta viendo lo que nos recomendaron en
información y turismo: el puente triple, otros puentes
más, el castillo (desde abajo), etc. Lo más bonito ha
sido callejear por sus calles. Es una ciudad coqueta, ya
digo y nos encantó pasear por sus calles.
Una historia antigua cuenta que el héroe griego
Jasón remontó distintos ríos huyendo de los
Argonautas, y una vez llegado al Ljubljanica, tuvo que
enfrentarse contra un dragón, saliendo victorioso de la
batalla. En 1901 el puente fue construido en honor al 40 aniversario de la coronación
del emperador Francisco José. Tampoco faltan bellas leyendas: la población afirma
que cada vez que pasa una doncella por el puente, los dragones mueven sus colas.
Hay que decir que durante todo el viaje
disfrutamos de un tiempo fabuloso, pero fue aquí
donde se truncaron nuestros planes, ya que se
instaló una borrasca sobre Eslovenia y no pudimos
visitar el Parque Nacional del Triglav y el Valle de
Logarska Dolina, así como el lago Bled y la
garganta Vintgar.
Nuestra última visita antes de iniciar el viaje
de regreso fue a la ciudad de Maribor, en la
actualidad es la segunda ciudad más importante
del país, presume de ser extrovertida, amable y
habladora, y el talante juvenil de los universitarios
que vienen a estudiar a Maribor acrecienta ese
sentir. Allí pudimos ver una parra que tiene más de
400 años de existencia.
De regreso a Castellón paramos en la
ciudad de Verona. Si recuerdan a Julieta y
Romeo, no podrán dejar de lado la romántica
ciudad donde transcurre su historia. Verona
es por excelencia la ciudad de los
enamorados,quienes viajan hasta allí para
recorrer la casa de los Capuleto y sumar
mensajes de amor a los cientos que ya se
han dejado en el balcón de Julieta. Por
supuesto, tampoco falta su tumba (en el