¡Madre mía el tiempo que llevan las cosas en el ordenador!, te pones, pero nunca sabes a la hora que vas a terminar...
Bueno, voy a intentar hacer un resúmen rápido de la jornada de hoy.
La ruta de senderismo por la
Sierra y el Hundidero de Camarolos prometía ser algo sencillito según las recomendaciones... Dificultad: Baja. Pero como decía la amiguita de Eva, se ve que la sacásteis de "rutascabraloca.com" porque vaya...
Comienza ascendiendo por una pista fácil, pero llegando a una valla metálica que debíamos atravesar y casi nos dejamos algo enganchado en ella, subir buscando la cuerda de la sierra se convirtió en un, subir y subir piedras... Nada de senderito cómodo.
María, que se acostó anche recordándome que no me dejara sus bastones se ha comportado como una campeona, ha podido andar tres horas fácilmente, que la verdad, con lo grandes que eran las piedras y los escalones para ella, está pero que muy bien.
Tras la parada bocadillo, llegados a un punto, la pobre ya no podía más, así que ya sabeis donde acabó...
Me resistía a subirla porque ya empieza a pesar mucho, pero la verdad es que después me alegré porque el camino, al no estar bien marcado se convirtió en peligroso para ella, a veces tuvimos que trepar agarrándonos con las manos debido a la fuerte pendiente...
Tras una paradita para descansar cinco minutos...
...Comenzamos a bordear la cumbre por la cara norte y como el sol me daba de frente, a un momento dado me desorienté y no encontraba los hitos... Salir de allí se estaba con virtiendo en un verdadero calvario porque las piedras eran afiladas como cuchillos durante cientos de metros y entre ellas se podían escurrir los pies en profundas brechas... Menos mal que al fin ví a los demás y pude encontrar el camino, que no estaba mucho mejor, pero al menos no era tan peligroso... María ya dormía en mi espalda hacía rato.
Me gustan estas flores...
Tras encontrar un prado donde una charquita con ranas invitaban al reposo, emprendimos el descenso por un camino que parecía que no terminaría nunca... Ya íbamos muy cansados todos...
El caso es que sólo han sido diez kilómetros, pero por lo tortuosos, se nos han hecho muy largos...
De todos modos, la sensación general (meos los niños) es de que a pesar del cansancio, ha sido un día muy agradable y el lugar era precioso... En las fotos no se aprecia, pero la verdad es que era magnífico el paisaje.
Buenas noches
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