Jose:
Estoy seguro, que a todos los que te conocemos y los que no; nos hubiera gustado estar junto a ti y tu familia, en momentos tan duros y tan difíciles de llevar. Callados, sin interferir en el dolor; simplemente un fuerte abrazo, un beso cariñoso para transmitiros, nuestro afecto y nuestro pesar.
Las distancias, a veces hacen insalvable, el poder compartir dichos momentos.
Pero, esta simple herramienta, nos permite en la distancia, haceros llegar los mismos sentimientos.
Sobran las gracias. Al igual que compartimos, alegrías, bromas, aficiones y buenos momentos; también debemos estar al lado de nuestros amigos o compañeros, cuando la angustia y el dolor, llama a su puerta.
Y la verdad, aunque intentemos ponernos en tu lugar, el dolor lo has tenido que pasar tu solo y su ausencia la sufriras, igualmente tu solo; porque ese tipo de dolor, no es compartible. Solo tu, tienes recuerdos y momentos, que han sido solo tuyos, vuestros; entre la ausente y tu.
El paso del tiempo, irá apaciguando el dolor y pese a no olvidarla nunca, tus recuerdos se dulcificaran, recordando; aquella mirada, aquella frase, aquella sonrisa, aquel consejo y te sentirás bien, con el recuerdo permanente de ella pero sin dolor. Recordarás con una sonrisa, con paz.
Ánimo Jose.