Desde el Rif Marroqui a los Alpes Ponticos

54 Llegamos cerca de Burgas porque sin querer nos ha traído el navegador por una ruta casi sin asfaltar, así que hemos cogido mapa en mano el mejor camino y hemos llegado cerca de Burgas, pues mañana haremos toda la costa de Mar Negro. Pernoctamos en una gasolinera de Aytos, muy tranquilos pues tiene un gran espacio muy cómodo. 287,4 Km. N 42º 42´00´´ E 27º 12´36´´ Día 28 de julio Hacia Burgas ciudad que no ofrece interés, después Sozopol, paseo cortito porque la gente esta en la playa y no hay ambiente como el año pasado, después Ensebar donde realizamos compras y comemos “pantagrueli- camente” con unos precios que da vergüenza de los baratos, aunque un conocido mío para tirarse el farol diría que le ha costado “ un pastón”. Para quien le interese, decir que todos estos países Bulgaria, Rumania, Turquía los precios son absolutamente ínfimos y no merece la pena comer en la AC. Lo que no tiene proporción en absoluto es el precio de los aparcamientos vigilados, y no es que aparques por seguridad sino porque no hay sitio: nos han cobrado 3 euros por cada hora. Decir de Nesebar que es un sitio precioso parece una isla, en tierra cerrada por un dique estrecho. Nesebar se llamaba Mensabrir y fue fundada en el 512 a de J, por los griegos que usurpándole el sitio a los pescadores tracios fue conquistada por el Khan Krum en el 812 con Iban. Pero lo verdaderamente excepcional son las iglesia y las basílicas en piedra y ladrillo, que fueron restauradas en diversas épocas por los pueblos que la ocuparon, por ello han llegado a nuestros días; griegos, bizantinos, búlgaros y otomanos. Alexander conoce la época de su apogeo en el siglo XVI. Después camino de Rumania hemos desviado para ver el monasterio troglodita de Aladza, habitado por eremitas el siglo XIII y XIV; tiene varios niveles, se accede a ellos por una escalera exterior que da mucho vértigo porque en el segundo tramo miras y te encuentras sobre la copa de los árboles, el primer nivel desde el suelo alcanza los 10 metros, la pequeña iglesia rupestre conserva unos magníficos frescos muy deteriorados. A la entrada hay un pequeño museo, que te hace ver la vida de la pequeña comunidad que lo habitaban, 600 metros mas lejos hay una pequeña catacumba que servia de sepultura. Pernoctamos en Banchik en la costa, al lado de la playa y de unos alemanes con los que compartimos “charla gestual”.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTMxMjYy