Lo más importante para cualquiera de ellos es no meterle "mierda", que si esta aplicación sirve para esto, pa' dentro, que si esta para esto otro, pa' dentro, en pocos días ya puedes tener maquina que va a pedales.
En el curro tenemos muchos problemas de compatibilidad con el software y hemos estirado todo lo que hemos podido el XP, ahora no hay más remedio que pelear para que funcione con el W7, de todas maneras el problema de base es que el hardware es barato "¿y eso es una pega?" diréis, pues para que se hagan bien las cosas, sí, por que la mayoría de los programas no requerían mucho hardware si estuvieran "bien hechos", pero como hay memoria y procesador para dar y tomar, pues se hace a la virulé, y sin un hardware potente no funciona.
Cada cierto actualizamos las maquinas y solo se nota el cambio al arrancar, después van igual, el problema es que el fabricante de determinado hardware actualiza el software y, aunque haga lo mismo, lo hace para que funcione en los nuevos ordenadores y como encima está deseando vender, no se preocupa mucho de dar soporte a los viejos.
En un portátil viejuno uso un Linux sin actualizar, por que si actualizo la gráfica deja de funcionar, como no uso cosas delicadas, ni accedo a bancos ni cosas así, si pillo un virus, lo formateo otra vez y fuera.
En el despacho tengo W8 64 bits y determinadas cosas van como una bala, todo el resto va igual o peor, por que como funcionan en modo 32 bits, a veces se raya y me toca reiniciar. Por lo menos no te estropea los otros programas como pasaba en otros.