Os cuento lo que suelo hacer yo.
- Lo primero es observar periódicamente la profundidad del dibujo. Entre los surcos suele haber unos pequeños nervios de goma que sirven de testigos para saber si el dibujo ya no tiene la profundidad suficiente.
- Observar asimismo si la dirección tiende a vibrar cuando se circula, esa vibración puede provenir de un simple desequilibrado sin más, en cuyo caso, en el taller la vuelven a equilibrar. Pero, también puede estar provocada por una deformación del neumático, deterioro de la carcasa y aparición de bultos en la banda de rodadura o en los flancos, en cuyo caso, si noto vibración en la dirección, no me olvido del asunto, sino que en cuanto puedo voy al taller y pido que revisen las gomas a fondo. Un buen especialista es capaz de detectar las deformaciones, incluso si son pequeñas, simplemente pasando las manos por toda la superficie de la rueda. Si esto se confirma, por muy nueva que esté o por muy bien que esté el dibujo, debe cambiarse.
En las ruedas traseras también se nota la vibración si se deforman, aunque si no se es fino en la percepción o no se le presta atención, puede tardarse bastante más en notarla.
Al respecto os diré que siempre es más fácil que aparezcan deformaciones de forma prematura en neumáticos normales que en los reforzados o en los especiales para carga. De esto se desprende otro consejo, si al cambiar gomas podéis elegir entre varios índices de carga y velocidad, si es posible, mejor poner la que tenga ambos índices más altos.