Hola Juan Carlos:
Yo, cuando mis hijos tenían la edad de tu hija, he hecho recorridos de vacaciones en un mes de más kilómetros de los que tu te planteas. Ahora bien, una cosa son los kilómetros a recorrer y otra los objetivos que quieres ver o conocer. Lo que quiero decirte es que se puede recorrer más distancia (más km.) en el mismo lapso temporal, aunque suene a Perogrullo, con menos etapas o lugares en los que detenerte. En mi caso, aprovechando que mis hijos han sido (y son) buenos viajeros, suelo aprovechar, cuando mi último destino de vacaciones está muy alejado de casa, para hacer una etapa inicial larga o muy larga. Madrugamos relativamente y a las 7 o así estamos en ruta. Hacemos todas las paradas que necesita la tripulación, numerosas y no muy largas, y descubrimos que 13 o 14 horas después estamos a más de 1.000 o 1.100 kilómetros de casa. En tu caso eso supondría encontrarte la noche del primer día de tu viaje, por ejemplo, en el País Vasco francés. Como hay que dar cuerda a la familia y al espíritu durante, siguiendo con el ejemplo, el segundo, tercer y cuarto día de viaje no te mueves más que para hacer los pocos kilómetros que te van a permitir conocer esa o aquella playa, el pueblito tal o Biarritz, etc. El quinto día de vuestro viaje, descansados y con sensación plena de vacaciones, volvéis a coger carretera y manta y os plantáis (siempre en el ejemplo) tras unos 625 km. en Chartres. Aquí el paseo vespertino, la visita a la catedral artificialmente iluminada y una buena cena hará que estéis descansados para que al día siguiente, después de hacer una última visita matutina a la catedral para ver las vidrieras, magníficas, con la luz del día, podáis hacer los 385 km. (todos los km. son aprox.) que os separan de Brujas. Así pues el sexto día de vuestro viaje a primera hora de la tarde estaréis, con buena parte del día por delante, en una preciosa ciudad en la que podréis pasearos a vuestro antojo, con muchas excursiones en un radio de pocos km. (no se puede dejar de ir a Ostende, al puerto, a comer marisco variado a precios populares), y allí os puede dar el 7º, 8º, 9º y 10º (en el ejemplo citado) días del viaje. Con los ojos empachados de tanto ver, tras recorrer algo más de 520 km. habréis llegado a Ámsterdam: y sólo es el undécimo día... Allí, a parte de conocer la ciudad, pasearse por sus canales, etc., y la obligada visita con los críos a Madurodam (en La Haya – Den Haag), hay multitud de pequeñas excursiones: a Edam, Volendam, Marken, Enkuize, etc., etc., o a ver las increíbles infraestructuras del Delta o del dique norte... Pues así habremos llegado, tras una semanita entera en Holanda, al 18º día de vuestro viaje en el que, después de un viaje de unos 700 km., podréis pernoctar en Blois o alrededores: en el Valle del Loira. Chambord, Cheverny, Chenonceau, etc., son nombres que evocan castillos. Puedes usar para ver esta zona hasta el vigésimo cuarto día de tu viaje en el que después de recorrer unos cortos 165 km. te encontrarás en Futuroscope. Merece la pena que accedas al parque esa misma tarde (entrada vespertina), que veas el espectáculo nocturno, y que el día siguiente, el vigésimo quinto, lo dediques por completo al parque. Será suficiente. El vigésimo sexto, para descansar del pateo de la vispera, después de unos 430 km. podrías estar en Hossegor, en Las Landas donde descansar y gozar de la playa un par de días completos antes de emprender el día 29 viaje hacia la península: estarás a unos 1.150 km. de Cadiz, con dos o tres días por delante para cerrar el circulo que habréis abierto un mes antes...
Esta es solamente una propuesta de viaje, muy similar por cierto a alguno de los que he hecho con mi mujer e hijos, y no pretendo nada más que hacerte ver que, desde mi punto de vista, no es ni mucho menos imposible el viaje que te planteas; eso sí, reduciendo algo el número de etapas sobre las que comentabas en tu post, y dejando algo que ver para próximos viajes...
Un saludo muy cordial desde este lado del charco.