¿Excursiones a pie o en coche?
En coche no te sé decir. No es que haya estado mucho en el Tirol, en realidad sólo una vez unos 5 días, pero fue de joven, con mochila a cuestas y sin coche (llegué por Interrail y nos introdujimos en las montañas hasta donde llegaba el tren), y luego más recientemente una breve entrada en coche desde Alemania, pero de unas horas (teníamos la base en Munich, así que no daba para mucho).
Los pueblos en general son monos, al principio llama la atención las "casas tipo Heidi", todo como muy de cuento (luego ves que es lo normal). Te encuentras bonitos puentecillos de madera cubiertos, y es relativamente habitual encontrar talleres de artesanos de la madera que esculpen todo tipo de figuras en troncos, y suelen tenerlo expuesto por el exterior. Muy llamativo. Generalmente si paras y les haces una visitilla les ves trabajar la madera. Por lo demás, la mayor parte de los pueblos viven del esquí, y te encuentras lo típico de esos lugares: una calle central llena de tiendas y bares, accesos a los remontes, etc.
Pero por lo que vi, no necesitas adentrarte más allá de Innsbruck para ver el Tirol. Lo que tienes que hacer es desviarte hacia los lados, meterte en las montañas "huyendo" del valle principal en el que está Innsbruck.
Por ejemplo, yo estuve en Mayrhofen, en el Zillertal (valle del Ziller), antes incluso de Innsbruck, y allí ya tienes paisaje alpino y pueblecillos monos. Allí hay una excursión sencilla, de un día, que me encantó: la subida al
Ahornspitze, un pico de casi 3000 metros (teniendo en cuenta que en el valle estás a 600 metros, la sensación de altura es impresionante; en nuestro pirineo hay picos de 3000 metros, pero en el valle sueles estar casi a 2000 m, por lo que la sensación de altura es mucho menor).
Aunque parezca una excursión de escalada, no lo es en absoluto: es simple senderismo. Pero las vistas desde arriba son grandiosas, impresionantes: ves decenas de picos, una panorámica impresionante de los Alpes, espectacular.
Además, lo bueno es que la excursión la haces en un día, porque hay un teleférico (el
Ahornbahn, el mayor de Austria) que te sube 1300 metros, así que luego ya te queda una subida asequible. Yo la hice fácilmente en un día, madrugando un poco, subiendo, comiendo en la cima mientras mirábamos el paisaje, y para abajo a coger el último teleférico de bajada (terminan pronto, sobre las 5 o las 6, creo recordar). El billete del teleférico es caro, pero merece mucho la pena esta excursión, y la posibilidad de subir fácilmente un 3000 en plenos Alpes sin ninguna dificultad técnica, pero al mismo tiempo sin que sea rodeado de turistas (porque hay que llegar a pie, y eso frena a las masas) es una oportunidad casi única.
También tienes un enorme refugio (casi un hotel) a mitad del recorrido, donde si quieres puedes comer o pasar la noche. Hay muchos que terminan la excursión allí y no siguen subiendo, pero la verdad es que si has llegado hasta allí merece mucho, mucho la pena llegar hasta la cima.
Supongo que excursiones de este tipo habrá centenares, pero yo es lo que conozco, y lo que con más cariño recuerdo del Tirol
