Si nos ponemos exquisitos, una buena toma de tierra se hace con un cable de cobre desnudo con una sección mínima de 35mm amarrada al primer forjado de una estructura de hormigón, o una placa de cobre-cinc enterrada entre capas de carbón activo. Aunque todos recurrimos a las pocas de cobre.
Las pequeñas derivaciones de las que estamos hablando, que no son suficientes para hacer saltar el diferencial de la caravana o de la instalación del camping (normalmente 30mA) se pueden solucionar con el contacto metálico de alguna parte de el chasis de la caravana con el suelo.
Muchos ponemos madera bajo las patas o llevamos las bases de plástico en las patas, por lo que dejamos la caravana aislada eléctricamente del suelo.
Si la corriente consigue pasar a través de nuestro cuerpo con unas chancletas húmedas o descalzos, también pasará y más fácilmente a través del chasis y las patas de la caravana, ya que la resistencia del cuerpo humano es mayor que la del metal.
Con eso sería suficiente para evitar esas pequeñas descargas.
Por supuesto también hay que comprobar, apretando el botón de test, que el diferencial de la caravana funcione.
Un Tester puesto en modo continuidad, colocado entre el terminal de tierra del enchufe de entrada de la caravana (el más gordo de los 3) y las patas, nos confirmara si tenemos estas unidas a la instalación de tierra de la caravana.