Hallan a una anciana de 95 años degollada y con un cuchillo clavado
El cuerpo sin vida de la mujer fue encontrado por uno de sus hijos en el dormitorio de un 'bungalow' del camping de Cabopino · No había indicios de robo y la Policía Nacional no descarta ninguna hipótesis
Pablo D. Almoguera / Málaga | Actualizado 04.10.2008 - 01:00
Acceso al camping de Cabopino, donde estaba alojada la mujer cuyo cadáver se encontró ayer.
0 comentarios 0 votos El cuerpo sin vida de una mujer de 95 años con un amplio corte en el cuello y un cuchillo clavado en uno de los costados fue encontrado en la mañana de ayer en uno de los bungalows del camping de Cabopino, en Marbella. El hallazgo del cadáver lo realizó uno de los hijos de la fallecida, quien avisó a la Policía Nacional, que ha abierto una investigación en la que se mantiene abiertas todas las hipótesis al no detectarse indicios de lucha o robo.
Fuentes cercanas al caso señalaron que hasta el lugar del óbito se desplazaron numerosos agentes de la Policía Nacional, entre los que se encontraban especialistas de la Policía Científica, que realizaron junto con los investigadores la pertinente inspección ocultar.
El hallazgo se produjo pasadas las 9:30, cuando un hijo de la fallecida se dirigió al bungalow que ésta ocupaba -el número 14- y descubrió el cadáver de su madre en el dormitorio con diversas heridas de arma blanca.
El primogénito comunicó rápidamente el descubrimiento a la Policía Nacional , que desplazó al camping de Cabopino a numerosos efectivos. Se estableció un cordón de seguridad y los especialistas en inspecciones oculares comenzaron a escudriñar la escena.
Las citadas fuentes explicaron que la fallecida, de 95 años de edad, presentaba un gran corte en el cuello que le había seccionado la tráquea y que tenía clavado un cuchillo en uno de los costados. Estas dos heridas le provocaron una gran perdida de sangre.
El arma blanca tenía unos 15 centímetros de longitud y se hicieron gestiones para determinar si pertenecía al juego de cubiertos de la vivienda.
Las fuentes consultadas señalaron que los investigadores mantienen abiertas diversas líneas de investigación. Una de las circunstancias que se observó durante la inspección ocular es que, aparentemente, no había indicios de robo, ya que los cajones no estaban desbaratados y no parecía que se hubiesen llevado ningún objeto. Además, no había elementos que hicieran pensar en que hubiese habido lucha, aunque debido a la avanzada edad de la fallecida, se cuestionaba la capacidad de oposición ante un ataque.
Los agentes incluso no descartaban la posibilidad del suicidio, aunque esta línea de trabajo se consideraba inicialmente remota por la forma.
El despliegue policial permaneció el lugar hasta pasadas las 12:30 y después de que la autoridad autorizase el levantamiento del cadáver.
El examen médico legal, que estaba previsto se realizase hoy, podrá arrojar algo más de luz a esta muerte.
Las primeras indagaciones arrojaron que la mujer llevaba residiendo en el complejo desde hacía tiempo. Al parecer, ésta estaba acompañada por dos de sus hijos, que ocupaban otro bungalow.