Es como Quarz16 te comenta. En realidad son 2 tapas:
- Una exterior, que desliza según introduces el depósito a su alojamiento y queda abierta en su posición de funcionamiento. Según sacas el cassette, por un sistema de muelle, se cierra.
- Otra segunda interior, que hay que abrirla a mano mediante un especie de palanca situada en la parte baja de la taza. Ofrece cierta (poca) resistencia. Cambias de posición la palanca y verás que taza y cassette quedan comunicados por un agujero oscuro. Ya lo tienes en funcionamiento y . . . . a la tarea.
Consejos:
Antes de colocarte en faena, asegúrate de haber abierto la comunicación entre taza y depósito. A todos nos ha pasado no haberlo hecho y cuando estás al lío, ves (más bien notas) que aquello no corre y luego tienes un zafarrancho de limpieza que "pa qué".
Intenta no echar papel higiénico, toallitas húmedas, etc, al depósito. Te acordarás a la hora del vaciado, pues atascan de manera fácil la salida y dificultan la limpieza del cassette. Nosotros lo solucionamos con un pequeño cubo de pedal en el que ponemos una bolsa de plástico donde van a parar los papeles . . . los evacuas con la basura normal.
Ya te darás cuenta que el sentarse en estos tronos es todo un arte. Es difícil conseguir encestar sin tocar al aro y requiere de cierta técnica. La cuestión es alinear en perfecta vertical columna, ojete y aro de entrada del depósito. ¡A los Gasol me gustaría verles!.
Esto de vivir a la intemperie tiene sus dificultades, pero ¡cómo engancha!.
Saludos.