Kiyo
Eclectic member
Nos definimos campistas y defensores del meioambiente, pero ¿estamos de acuerdo con esto?:
DIARIO DE CÁDIZ, 14 de febrero de 2006
"El Gobierno prepara un impuesto para coches diésel y todoterrenos
El nuevo gravamen, que pretende castigar el uso de los vehículos más contaminantes, podría aplicarse al final de la legislatura, según Pedro Solbes
madrid. Los actos de celebración del primer aniversario de la firma del Protocolo de Kioto –fue el 16 de febrero de 2005– empezaron ayer con una mala noticia para los conductores, ya que el Gobierno se ha propuesto desincentivar el uso del coche mediante un incremento del gravamen. Así lo anunció ayer la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, quien señaló que el Ejecutivo está trabajando en un impuesto específico, que podría aprobarse a lo largo del presente ejercicio, coincidiendo con la esperada reforma del IRPF y del Impuesto sobre Sociedades.
Narbona explicó que la nueva tasa gravaría, de forma especial, a los vehículos todoterreno y a los automóviles diésel. En el caso de los primeros resaltó el alto consumo de combustible que registran, mientras que para los segundos arguyó que el diésel emite una gran cantidad de partículas contaminantes a la atmósfera. Por tanto, "parece oportuno que tengan una desincentivación", subrayó. Pese a esta determinación, el Ministerio de Economía y Hacienda salió al paso puntualizando que, de momento, "no hay medidas ni decisiones concretas al respecto" y que las posibles medidas que se adopten en el ámbito medioambiental no entrarían en vigor hasta el "tramo final" de la legislatura –habría que llegar a acuerdos con comunidades autónomas y ayuntamientos–.
Según el secretario general para la Prevención de la Contaminación y el Cambio Climático, Arturo González Aizpiri, el Ejecutivo estudia dos alternativas para gravar a los coches más contaminantes: actuar sobre el Impuesto de Matriculación (competencia de las autonomías) o hacerlo sobre el de Circulación (bajo la potestad de los consistorios).
El anuncio de la ministra de Medio Ambiente coincidió con el desarrollo de una "acción directa" por parte de la asociación ecologista WWF/Adena ante la sede de su departamento, en la que esta organización pedía al Gobierno que reduzcan los derechos de emisión de gases de efecto invernadero a la industria. En este sentido, Cristina Narbona explicó que, además del mencionado impuesto sobre vehículos, el Gobierno ya prepara otras medidas para cumplir con el Protocolo de Kioto, como el Segundo Plan Nacional de Asignación de Derechos de Emisión. Dicho plan, que regulará las emisiones de dióxido de carbono en la industria entre 2008 y 2012, comenzó a elaborarse el pasado diciembre y estará terminado en junio. Entre sus prioridades estarán la innovación tecnológica en los sectores industriales y la incorporación de energías limpias.
La responsable de Cambio Climático de WWF/Adena, Mar Asunción, aprovechó el acto para instar al Ejecutivo a que en ese segundo plan reduzca, en al menos 23 millones de toneladas de CO2 equivalente, la cantidad asignada a los sectores industriales. "La industria emite el 40 por ciento de los gases de efecto invernadero, y debe cumplir su parte del compromiso", advirtió.
La ministra de Medio Ambiente reconoció que España "está lejos del objetivo" del Protocolo de Kioto, pero "hay años por delante para reconducir la situación" y se están tomando medidas. En el Protocolo de Kioto, España se comprometió a desacelerar el ritmo de crecimiento de las emisiones, para que en 2010 la tasa de aumento no superara el 15 por ciento en relación con los niveles de la década de los 90. Aunque los propósitos eran buenos, en 2004 las emisiones se elevaron un 45 por ciento en comparación con ese periodo. "

DIARIO DE CÁDIZ, 14 de febrero de 2006
"El Gobierno prepara un impuesto para coches diésel y todoterrenos
El nuevo gravamen, que pretende castigar el uso de los vehículos más contaminantes, podría aplicarse al final de la legislatura, según Pedro Solbes
madrid. Los actos de celebración del primer aniversario de la firma del Protocolo de Kioto –fue el 16 de febrero de 2005– empezaron ayer con una mala noticia para los conductores, ya que el Gobierno se ha propuesto desincentivar el uso del coche mediante un incremento del gravamen. Así lo anunció ayer la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, quien señaló que el Ejecutivo está trabajando en un impuesto específico, que podría aprobarse a lo largo del presente ejercicio, coincidiendo con la esperada reforma del IRPF y del Impuesto sobre Sociedades.
Narbona explicó que la nueva tasa gravaría, de forma especial, a los vehículos todoterreno y a los automóviles diésel. En el caso de los primeros resaltó el alto consumo de combustible que registran, mientras que para los segundos arguyó que el diésel emite una gran cantidad de partículas contaminantes a la atmósfera. Por tanto, "parece oportuno que tengan una desincentivación", subrayó. Pese a esta determinación, el Ministerio de Economía y Hacienda salió al paso puntualizando que, de momento, "no hay medidas ni decisiones concretas al respecto" y que las posibles medidas que se adopten en el ámbito medioambiental no entrarían en vigor hasta el "tramo final" de la legislatura –habría que llegar a acuerdos con comunidades autónomas y ayuntamientos–.
Según el secretario general para la Prevención de la Contaminación y el Cambio Climático, Arturo González Aizpiri, el Ejecutivo estudia dos alternativas para gravar a los coches más contaminantes: actuar sobre el Impuesto de Matriculación (competencia de las autonomías) o hacerlo sobre el de Circulación (bajo la potestad de los consistorios).
El anuncio de la ministra de Medio Ambiente coincidió con el desarrollo de una "acción directa" por parte de la asociación ecologista WWF/Adena ante la sede de su departamento, en la que esta organización pedía al Gobierno que reduzcan los derechos de emisión de gases de efecto invernadero a la industria. En este sentido, Cristina Narbona explicó que, además del mencionado impuesto sobre vehículos, el Gobierno ya prepara otras medidas para cumplir con el Protocolo de Kioto, como el Segundo Plan Nacional de Asignación de Derechos de Emisión. Dicho plan, que regulará las emisiones de dióxido de carbono en la industria entre 2008 y 2012, comenzó a elaborarse el pasado diciembre y estará terminado en junio. Entre sus prioridades estarán la innovación tecnológica en los sectores industriales y la incorporación de energías limpias.
La responsable de Cambio Climático de WWF/Adena, Mar Asunción, aprovechó el acto para instar al Ejecutivo a que en ese segundo plan reduzca, en al menos 23 millones de toneladas de CO2 equivalente, la cantidad asignada a los sectores industriales. "La industria emite el 40 por ciento de los gases de efecto invernadero, y debe cumplir su parte del compromiso", advirtió.
La ministra de Medio Ambiente reconoció que España "está lejos del objetivo" del Protocolo de Kioto, pero "hay años por delante para reconducir la situación" y se están tomando medidas. En el Protocolo de Kioto, España se comprometió a desacelerar el ritmo de crecimiento de las emisiones, para que en 2010 la tasa de aumento no superara el 15 por ciento en relación con los niveles de la década de los 90. Aunque los propósitos eran buenos, en 2004 las emisiones se elevaron un 45 por ciento en comparación con ese periodo. "
