Marruecos, reino de los mil reinos
dominios se extendían hasta Argelia, hijo del dios del mar Océano y de la diosa de la tierra
Gea, gracias al hachazo que propinó en la tierra, hizo que se abriera el lugar que ocupa hoy el
mar, despues de una encarnizada lucha,
Cuando veo al frente la Costa Africana, mi corazón no cesa de latir, y cuando piso esta tierra mi
cerebro, mi alma y mis sentidos me dicen que estoy en casa
Desembarcamos en Ceuta el enclave portugués, que España consiguió casi por azar, allí lo
primero es ver, la impresionante estatua que el pueblo ceutí, agradecido, construyó para
Hércules, con toda su fuerza y esplendor
Nos dirigimos a una frontera que cada dia resulta más fácil y más fluida, despues de parar unos
minutos en el Chorrillo. lugar de descanso y pernoctada autocaravanistas, en la frontera, se
encuentra Enrique a un conocido ,que nos lleva a sellar los pasaportes y el permiso del
vehículo, negándose a que Enrique lo gratifique, al final le regalo un bizcocho, ya que no quería
coger dinero
Una vez en el país llenamos el depósito ,ya que los 87 céntimos que cuesta hoy el gasoil,
seguro que nos costara a lo largo del viaje algún que otro sofocón con los piquetes de la cierta
Hércules Ciudad de Ceuta