Aquitaine y Midi-Pyrénées 2013
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Los placeres del juego
La gente de Dax es jugadora por naturaleza. Y cuando juega, lo hace para ganar. El
club de
rugby
de la ciudad es, desde hace tiempo, un vivero de talentos para el equipo nacional francés.
Y con el mismo ardor los hinchas locales animan a los campeones de rugby y a los pelotaris que
se dan cita todo el año en el Jai Alai, el frontón del estadio, o en el Trinquet des Charmilles para
partidas de pelota endiabladas.
¿Y si jugamos?
Otros lugares, otros juegos, otras sensaciones:
el hipódromo
y
el casino de Dax
, para el placer
de apostar y los espléndidos greens de la Costa de Plata para disfrutar de un buen swing con
vistas al mar.
En junio, el juego se convierte en teatro con el festival de la Comedia y sus espectáculos de calle;
y musical en julio, gracias a los conciertos clásicos del Festival des Abbayes.
El clima suave de las Landas permite la
práctica del golf
todo el año. Entre el bosque y el
océano, los campos de golf de la comarca ofrecen trazados muy originales que combinan la
naturaleza ondulada y arenosa del suelo. ¡Una atmósfera incomparable!
Los sabores de las Landas
Todos los gustos están en su naturaleza.
Dax es el escaparate gastronómico de un departamento mosaico que se visita disgustando. En
estas tierras,
el turismo y la gastronomía
van siempre de la mano. El inmenso bosque de las
Landas hace del departamento un país de caza y setas. Bajo esos grandes pinos, las aves de
granja son criadas en total libertad.
Más al sur, en las fértiles y onduladas tierras de la Chalosse, Tursan y Armagnac, se alternan
elegantes bastidas e iglesias románicas, viñedos y campos de maíz, cereal indispensable para
cebar a los patos y hacer así el foie gras, pero también para alimentar al sabroso buey de
Chalosse.
De
los patos grasos
se aprovecha todo: magrets, confit, aiguillette, foie gras, mollejas, rillettes,
hasta la carcasa, con la que se chupará los dedos.