

Luego fuimos a visitar el Palacio Bahia. Se dice que Ahmed ben Moussa dedicó este magnífico palacio
especialmente a su preferida entre las 4 esposas y 24 concubinas que conformaban su harén; de hecho,
palacio de la Bahia significa
palacio de la bella o la brillante
.
Deambulamos por las numerosas habitaciones y sus patios… aunque solo es visitable un tercio del palacio.
Ya se nos hace la hora de comer y vamos a intentar comer en la Terrace des épices…Preguntamos por la
plaza de las especias y al llegar… no encontramos el restaurante. Volvemos sobre nuestros pasos… pues
hemos visto algún restaurante, hasta que encontramos sitio en uno… bueno… uno que nos lleva a otro, en
la terraza, aunque también tiene sitio en la sala…pero preferimos probar si nos da el aire.
Tras la comida… y un helado, vamos a ver la Medersa de Ben Youssef, que es la más antigua de Marrakeck
y alrededor de la cual se construyo la medina. Con el tiempo ha sufrido modificaciones y poco queda de la
original.
Hay un pack, que pagando un poco más, se puede visitar el museo de Marrakeck. Como nos da tiempo lo
hemos cogido, con lo que sin entretenernos mucho en la medersa, nos vamos al muse, que está al lado.
También es conocido como Palacio Mnebhi, que fue construido por el ministro y sultán Mehdi Mnebhi, este
riad palaciego tiene un gran patio alrededor del cual se distribuyen las habitaciones. Pero al poco quedó
abandonado. Fue
Omar Benjelloun
quien lo recuperó y restauro, junto con la medersa de Ben Youssef y la
Qubba almorávides. De esta manera, el palacio acondiciono las estancias par la exposición de arte e historia
de Marruecos.
Tras esta visita , volvemos, callejeando por la medina, a la plaza neurálgica de Marrakech, encontramos en
la parte de abajo un bar con terraza donde poder tomar algo y disfrutar de una vista sobre la plaza, vemos el
pasear de la gente, de los turistas, de los vendedores…vemos ponerse el sol…. Que relax!!