Pues.... como soy muy veterano ya he pasado de todo. Hace bastantes años, tuve que llevar desde Ourense a Madrid, unas 15.000 revistas. Tenía un Renault R-12 y un carro de carga, así que a las 12 de la noche cargué todo el carro de paquetes de revistas, le retiré los asientos traseros al coche y cargue hasta los topes. Eché a andar toda la noche y cuando estaba bajando después de los túneles del Guadarrama, al querer sintonizar una emisora, el remolque me pegó un latigazo, y otro y otro más, llevándome de lado a lado de la autopista, hasta que pude parar. Como era de madrugada no le causé problemas a nadie de los que venían detrás... porque no venía nadie. A partir de ahí, y tras respirar hondo porque fui consciente del peligro que corrí, disminuí la velocidad y acabé entrando en Madrid (iba a llevar las revistas a Cibeles, donde estaba la DG de Correos) casi como quien pisa huevos. ¿Cuál fue mi error? Evidentemente, cargar en exceso la parte de atrás del coche que con el peso de la lanza y al ser tracción delantera, la carga se fue "acomodando" comn los baches (no había la autovía actual) hasta hacer que la dirección y la tracción "flotase".
Es una muy mala situación y muy desagradable, pues pierdes totalmente el control del conjunto. Si pegas contra los guardarailes... te puedes quedar sin coche, sin caravana y sin dientes... ¿Solución? Distribuir la carga, no excederse pensando en que uno es el más lito de la clase, y ser prudente respetando las velocidades máximas.