

Lunes 14/08/17
: 6:30 de la mañana, temperatura exterior 10º y la interior 16,3º. Después de
desayunar mientras mi amigo y yo vamos a recepción para pagar, éste me explica que su mujer se
acaba de caer por unas escaleras y parece que se ha dañado seriamente la rodilla. Ella tiene mucho
dolor y no puede andar. Necesita que la visite un médico y de momento no van a venir a Austria
con nosotros, prefieren volver a Múnich para que sus amigos los acompañen al hospital. Espero
que solo sea el batacazo y se reincorporen a la ruta en uno o dos días… Pago 23€ por una noche
y salimos a las 9:00 con 17º. La autopista no va excesivamente llena, pero como es típico en
Alemania, encontramos obras intermitentes que hacen que nuestro avance sea más lento.
Entramos en Austria y contacto con mi amiga. Parece que las perspectivas no son buenas, en la
radiografía no se ve, pero creen que se ha roto un ligamento. No pueden asegurarlo porqué la
máquina para comprobarlo está estropeada y tienen lista de espera. Pensaba que solo pasaba en
España…El caso es que por desgracia tienen que volver a casa, ella en avión y el resto de la familia
con el coche y la caravana. Es una pena tener que interrumpir los planes hechos con tantas ganas
e ilusión. Nosotros continuamos el viaje con un sabor agridulce…
Llegamos al camping
Tirolerhof
situado en Gallspach. Lo escogí a última hora, me pareció
interesante y aunque no encontré mucha información sobre él, las pocas opiniones que había eran
muy buenas. Les mandé un mensaje y me contestaron que generalmente tienen plazas libres.
Cuando llegamos está cerrado (cierran al mediodía), pero un hombre nos indica que nos podemos
instalar donde queramos y más tarde ya haremos inscripción. El “camping”, son dos grandes prados
sin parcelar en la parte trasera de un hotel/granja y los servicios están situados en el edificio del
hotel. Estos son muy muy básicos. 3 WC (repartidos entre hombres y mujeres), 1 urinario, 2 lavabos
y 1 ducha, siii solo una, que está situada en una salita en la cual está uno de los lavabos y el único
fregadero que hay. O sea que si hay alguien en la ducha no puedes fregar platos y viceversa. Lo
compensa el entorno. Un césped verdísimo que parece recién cortado. Cuando hemos llegado solo
había una caravana y una autocaravana. Tranquilidad 100%. Escogemos plaza y montamos toldo
(lo estrenamos hoy), sacamos mesa, sillas, microondas, etc. Comemos puré casero y
hamburguesas. Podríamos estar en la gloria pero nos acompañan unas molestas avispas.
Montamos la trampa y sacamos a “Excalibur”, una nueva raqueta mata insectos eléctrica que
compré a última hora en Terrassa. “Dardo” la que compramos hace dos años se queda en casa.
Después de un rato de descanso voy a “recepción” y una amable mujer me atiende (en alemán).
Camping Tirolerhof
Después nos marchamos a Wels. Es una ciudad cercana a Gallspach, que tiene un centro con
edificios muy bonitos y un campanario precioso. Damos un paseo, sacamos las primeras fotos de
Austria y volvemos al camping. Cuando llegamos vemos que se han instalado dos familias con
niños, unos holandeses y otros franceses. Mientras Ariadna se va a la ducha, Xavi y yo nos vamos
a tomar una cerveza al bar del hotel. Bueno, no es exactamente un bar. Son unas mesas situadas
en la entrada, ahora les da la sombra, hay 26º y se está de maravilla, con el airecito que pasa casi
hace fresco. Mientras degustamos nuestras Grieskirchner pasa una bandada de patos a un par de
metros de nosotros, se asustan en cuanto nos levantamos para intentar fotografiarles. En un
momento dado, viene la amable señora del camping y nos dice un poco en inglés y más alemán,
que no podemos dejar de visitar un par de sitios muy bonitos. Nos regala un mapa de la zona y veo
esos lugares los tenía previstos para el miércoles. Pasa el tiempo y va refrescando. Volvemos a la
caravana a preparar la cena. Tortilla de alcachofas que viene de casa, ensalada y embutidos.