Aquitaine y Midi-Pyrénées 2013
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En el siglo XVIII, la Orden Hospitalaria
pierde su carácter religioso y se
convierte en Orden de nobles. El
Priorato llega a ser un mayorazgo de
infantes y príncipes. En este siglo se
construye el canal del Gran Prior, que
fue de gran utilidad para la agricultura.
En el año 1742 se acabó de construir
en la iglesia colegial de Santa María el
Camarín de la Virgen del Rosario, de
planta cuadrada y estilo barroco, con
el zócalo y suelo de cerámica de
Talavera, siguiendo la tradición de los
camarines andaluces.
El siglo XIX fue para Alcázar de San Juan el siglo de la decadencia, ya que
a lo largo de él fue perdiendo lo que durante siglos dio esplendor a esta
villa. En 1854, tras la llegada del ferrocarril a España, el ingeniero inglés
Mister Creen señala en Alcázar un nudo ferroviario de importancia y el 24
de mayo de 1858 la reina Isabel II inaugura la línea Madrid-Alicante,
pasando el tren real por la estación alcazareña. Desde este momento se
abren nuevos horizontes para nuestra villa, la cual se vuelve a convertir en
cabecera de comarca. En 1868 la reina Isabel II fue destronada y abdica en
su hijo Alfonso XII. Con el triunfo del liberalismo se cierra para siempre el
convento de Santa Clara, aprovechándose el edificio para el Ministerio de
Guerra, que lo convirtió en cuartel.
En el año 1877 el rey de España Alfonso XII concedió a Alcázar el título de
ciudad. A finales del siglo XIX se vuelven a abrir los conventos alcazareños.
Los primeros en regresar a nuestra ciudad son los padres trinitarios,
quienes fundan en 1882 un colegio y en 1899 los padres franciscanos
vuelven a Alcázar y abren de nuevo la iglesia monumental de San Francisco
de Asís.
El siglo XX está marcado
principalmente por el
ferrocarril, por la Guerra
Civil (Alcázar es tierra
republicana) seguida de la
penuria
general
que
hundió España entera en
la
miseria
y,
recientemente, por la
aparición y el crecimiento
del polígono industrial.