

Miércoles 03/08/16:
Hoy toca traslado de camping y de país. Salimos antes de las 09:00 dirección a
Cracovia y en la autopista volvemos a encontrar obras intermitentemente. Antes de llegar a Polonia
nos comemos unos bocadillos y continuamos. Teníamos intención de cambiar Zlotis en la frontera,
pero no hay ni siquiera un chiringuito. Esta parte de autopista polaca es nueva y gratis hasta unos 40
km. antes de llegar Cracovia. A falta de Zlotis, el peaje lo tenemos que pagar con tarjeta. Llegamos
al camping
Clepardia
y por suerte tienen plazas libres. Intenté reservar, pero me dijeron que no hacían
reservas, que si no llegábamos muy tarde no habría problema. El camping no es muy grande,
herboso, con bastante sombra y parcelas de medidas extrañas, nos asignan una donde, caben
justitos la caravana con el toldo y el coche. Los servicios están en módulos y son viejos y cutres. Wifi,
duchas (de las que odio…) y lavadoras gratis. El personal de recepción, bueno… antipático no es
pero… Hablan inglés correctamente, quizás demasiado rápido, nos cambian moneda sin problema.
Es el camping más cercano a Cracovia y que tiene mejores críticas. Tiene parada de autobús
relativamente cerca. Y una piscina creo que municipal justo al lado.
Nos instalamos y quedo con mis compañeros de trabajo Anna y Joan que están también de
vacaciones con su hermano y cuñada. Compramos los billetes de autobús de ida y vuelta. Como los
mapas son enanos, no sabemos en qué parada tenemos que bajar, lo hacemos en la que nos parece
que debe ser el centro y… ¡bingo! hemos acertado, en 5’ andando llegamos al “Rynec” o plaza del
mercado. Con sus 40.000 m2 es la plaza medieval más grande de Europa. Hay mucha gente y hace
calorcito pero se soporta bien. Nos encontramos con nuestros amigos en frente de la basílica.
Paseamos un rato y nos contamos las peripecias de ambos viajes. Cuando llega la hora de cenar,
vamos al restaurante Pod Wawelem, famoso por el camión de cerveza que decora el exterior, pero
sobre todo por la enormidad de sus raciones de comida. Está muy lleno, pero conseguimos una mesa
fuera (mucho mejor porqué dentro hace calor…). No tenemos mucha hambre y la mayoría pedimos
ensaladas excepto Ariadna que quiere un codillo que compartirá con Xavi. Las ensaladas son de
medidas “normales” tirando a completitas, pero el codillo es… bufff, gigantesco, suficiente para los
tres y no nos quedamos con hambre. La cena con las cervezas y Sprite nos cuesta 75 Zloti, unos 19€
los tres. Salimos y es completamente de noche, algunos edificios y monumentos están iluminados y
la Rynec es aún más impresionante. Nuestra intención es volver al camping en autobús, pero son
casi las 12 y parece que no hay servicio de autobuses a esas horas. Gracias Anna i Joan por
habernos acompañado en coche. Nos despedimos de ellos porqué regresan a casa mañana. Llegada
al camping y a dormir.
Rynec (Cracovia)