Hola a todos.
Acabamos de aterrizar en casa y aún nos extraña oir hablar en castellano después de un mes rodeados del francés y sin ningún compatriota. Con calma lo contaremos. Unas notas previas:
Franceses: educación en los campings por encima de lo acostumbrado. Silencio a las 22.30 o 23h y real. Nos han acogido a pesar de no hablar francés nadie excepto Jose que recordó como pudo el francés del instituto ya que nadie hablaba otra cosa.
Bicicletas: carriles bici por todos lados, cuando van por carretera tienen absoluta prioridad, van por el medio del carril y tu detrás pacientemente hasta que puedas adelantar. Los niños también van por la carretera sin problemas. Hasta los macarrillas con coches tuneados lo respetan. Vamos igual que aquí.
Coches: en los campings se va a 10Km/h porque "hay niños" y se respeta, increible.
Playas: largas, grandes mareas, agua más caliente que aquí (zona Atlántica), poca gente (aunque ellos decían que había mucha gente, supongo que no han venido a España).
Precios: fruta, verdura, carísima y poca variedad. El resto un pelín más que aquí. Totalmente asequible.
Gasoil: en Carrefour por ejemplo a 1.24 en autopista a 1.42.
Campings: hemos pagado máximo 30 euros/dia, precio que decidimos nosotros cuando los buscamos. Agosto, temporada alta y todos buenos campings pues tenían todo lo que pedimos: parcela enorme (80-100mm^2 reales), agua caliente en fregaderos, lavabos y por supuesto duchas, parque con pista de juegos además de zona de columpios...y a veces piscina (aunque intentamos que no hubiese) y en zonas turísticas. Deberían de aprender muchos campings de aquí. Diferente: baños unisex, te das cuenta de la optimización que supone.
Encantados con los carriles bici, con las playas y la gente: volveremos aunque quizás añadamos algo de montaña francesa.
Más adelante ya habrá un relato con fotos. Mientras regresamos a la rutina y se nos pasa la depre posvacacional os leo.
