¡Uf! tema peliagudo... :neutral:
Merce, me alegro de que tan sólo sea una secuela porque así sabemos que durará poco, es cierto que lo del otro día en el coche pudo hacer que reapareciera, pero seguro que desaparece pronto. Cuídate.
Mi primo murió en abril de este mismo año. Estuvo un mes enfermo y no pudo saber nada, la mayor parte estuvo sedado. en los momentos de consciencia le dijeron otra cosa, no había nada que hacer y no era necesario que pasara el mal trago. Claro, mi tía, ella tenía esperanzas, los médicos le decían que no había solución, pero ella se aferraba a su propia idea. Quería que le hicieran más pruebas, que lo vieran otros médicos, en definitiva, una serie de historias que no tenían sentido cuando no hay solución y por no querer creer la realidad. Se pasó las primeras semanas albergando esperanzas y cuando mi prima le decía la verdad no se la creía. Cuando mi padre le preguntaba como había pasado el día ella decía cosas como: "Lo encuentro mejor, se ha sentado incluso". Pero cuando le preguntaba a mi prima esta le decía: "Mi madre no quiere ver la realidad, él no se ha sentado, lo han incorporado pero enseguida han tenido que sedarlo de nuevo". Cosas así hasta que la última semana habló con ella un psicólogo y se lo hizo entender. Entonces su actitud con su hijo fue diferente, en lugar de estar todo el tiempo pensando en qué podía hacer para que se salvase comenzó como a despedirse, le daba besos, le acariciaba, le hablaba y le decía que le quería y que siempre iba a quererlo. Creo que su interior estaba más tranquilo, como más resignado, al menos es la impresión que me daba y cuando él murió ella vio su descanso y no sintió decepción, porque ya estaba preparada.
Esto es muy triste, pero es así como lo vivimos.
Me acuerdo que lo pasaste mal esos días... Es terrible vivir momentos como el que describes... Yo los viví con mi suegra. Pero fuímos muy conscientes desde el primer momento de que lo que tenía, no le permitiría estar entre nosotros mucho tiempo. Ella en cambio, que tuvo conciencia hasta dos días antes de irse, se mantuvo con una entereza digna de admirar... No me creo que no se diera cuenta de que le quedaba poco, es más, falleció a principios de octubre y en una ocasión, una semana antes me dijo...
-Angel, esto que tengo creo que no va a tener arreglo, ya no me dan de comer... y así no llego a las navidades...
Merce, mi opinió es que si el medico no conoce nada de tu vida, de con quien vives, y que madurez tienes, lo mejor es que lo primero es que te mande al xicologo, para que te prepare con mucha delicadeza de la mala noticia que tienén que darte, por que no todos estamos preperados para enfrentarte a una nueva vida, ahunque tu en ese momento lo preguntes por desconocimiento de lo que te espera, algunas personas han empeorado por el poco tazto que tienen para decirlo, con eso que ahora qel paciente tiene que saber lo que le pasas. Y lo digo con concimiento.
Lo primero por que la misma enfermedad no se desarroya en todos los enfermos igual, y unas personas son mas fuertes que otras.
Claro, imagino que tú lo ves desde tu punto de vista, como todos los demás. Yo por ejemplo, que tengo mucho miedo a las enfermedades y a la muerte, creo que lo llevaría fatal, pero desde luego, tengo clarísimo que quiero saber la verdad de lo que me ocurra, no quiero que me engañen. Evidentemente, si hay pocas esperanzas de cura, prefiero saberlo.
Por supuesto, todo lo que concierna a mi familia, con todo detalle. Es duro, pero a veces al enfermo se le cuenta menos que al familiar por aquello de que no sufra... Aunque sigo pensando que ella debía intuirlo, era una persona muy culta y lista...
Bueno, es que hay algunos detalles mezclados ¿lo tiene que saber la familia o el paciente solo? ¿porque lo tiene que saber la familia? ¿porque no?, desde el punto de vista de padre, quiero saberlo todo de todo sobre mis hijas, hasta lo peor, para estar preparado, desde el punto de vista de pareja, ¿tiene que sufrir ella por mi? supongo que ella piensa que si.
Pues a eso voy... A Ana el médico que estaba tratando a su madre la llamó para decirle que tenía aquello con una esperanza de vida de entre tres y seis meses... Fué un palo tremendo, sobre todo porque fué poco delicado al dar la noticia. Ella habló con su madre y le dijo lo que tenía, pero no el grado. Y lo aceptó bastante bien... Su madre empezó a empeorar y duró tres meses...
A pesar de que ese hombre fué duro, creo que hizo bien en ser franco, yo lo prefiero así.