

Siguiente visita la Residenz, otra vez sin poder hacer fotos y aquí si me da rabia porqué tiene salas
magníficas. Incluso vemos la catedral desde donde está el organista, la vista desde esa altura es
muy buena y como allí en ningún lugar prohíben usar cámaras… hago fotos. La visita es corta, de
hecho, casi todo el día hemos hecho visitas a lo japonés… No somos ni de los que se quedan 20
minutos contemplando un cuadro, ni de los que pasan a toda velocidad sin casi ver nada, pero hoy
nos parecemos un poco a estos últimos. Nos marchamos a coger el trolebús para ir al P+R.
Preferimos hacer la visita del museo de la cerveza y el palacio de Hellbrunn en coche. Quedan muy
apartados del centro y no quedemos complicarnos con transporte público. Cogemos el 1 (los chicos
de información del P+R nos han dicho que aparte del 8, el 1 también va allí), pero este va al Redbull
arena (hoy hay partido). Después de unos minutos en el interior del autobús (los 3 solos), el
conductor se dirige a nosotros en un perfecto inglés y nos dice que este autobús se queda allí. Para
ir al P&R, tenemos que desandar lo andado. Le preguntamos a unos policías y nos dicen que la
Messe está justo detrás del estadio. Decidimos ir andando. Ponemos el Maps en el móvil y o bien
los policías no tienen ni idea o bien nos han gastado una broma, ya que ese “justo detrás” son más
de 45’ caminando a paso ligero cargados con las chaquetas, paraguas y cámaras. Cuando por fin
llegamos al coche, decidimos de pasar de la visita al museo de la cerveza e ir a Hellbrunn (nos
viene de camino a casa). Al llegar nos dan hora para la visita guiada de los juegos de agua para
las 17:45, como falta un rato entramos en el palacio que visitamos a velocidad de tren-bala porqué
si no, no llegamos a tiempo a la visita de los jardines. El guía, primero en alemán y después en
inglés nos va explicando diferentes curiosidades de la construcción de los jardines y todo lo
relacionado con los juegos del agua. Hay muchos… Nos mojan cuando menos lo esperamos… ¡Y
en diversas ocasiones! Los niños son los que más disfrutan, aunque también los adultos lo
hacemos. De vuelta a casa, me encuentro a la propietaria del camping y le pregunto cuál es la
mejor carretera para ir a Hallstatt, me comenta que pase más tarde por recepción que me lo
explicarán. Cuando voy, el marido me está esperando con un mapa y la ruta preparada. Me da
unas explicaciones y me desea que lo pasemos muy bien. Son encantadores. Escribo diario. Cena,
partida y Zzzzzzzz.
Palacio y jardines de Hellbrunn
Temperatura máxima 20º - Km. recorridos 111