

Freudenstadt
Al llegar a Freudenstadt nos recibe una plaza inmensa. Aparcamos allí
mismo. Nos dirigimos a la oficina de turismo, en la misma plaza, y nos
dan un plano. No hay nada mas que ver que la plaza.
Eso si, sus dimensiones son espectaculares. Está dividida por la
carretera. A un lado hay una zona comercial porticada y al otro una
fuente y una curiosa iglesia, cuya planta tiene forma de L.
Freudenstadt