

¡Y cómo no! A mitad del camino, la fuente reparadora. Esta no es muy antigua. La
inscripción en una piedra sobre sus tres caños nos recuerda su origen: “SE HIZO ESTA
OBRA SIENDO ALCALDE DON TEOFANES LOPEZ. 1918”
Fuente centenaria en la calle Teodoro Perianes
Antiguamente, los dinteles servían para algo más que para crear vanos en los que
poder colocar puertas y ventanas. En ellos se grababa frecuentemente el nombre de los
propietarios de la casa y alguna que otra advocación cristiana. Son frecuentes las cruces en
los dinteles como signo de protección de la casa contra el mal. En la misma calle Teodoro
Perianes, hay un ejemplo de uno de esos dinteles. No falta nada: cruz, nombre, cargo, año
de la construcción y advocación Mariana.
Dintel de una de las casas en la calle Teodoro Perianes