El camino sigue bastante malo, por no decir malísimo a unas cotas de altura dentro de
las montañas del Anti Atlas, situada en medio de un circo de montañas de granito rosa,
cerca de la ciudad hay piedras pintadas por el pintor Jean Verane que residió aquí una
temporada, es famosa por su floración de almendros, pero Tafraoute a pesar de su fama
,no suele ser muy visitada por el mal camino que conduce a ella y porque en realidad,
ofrece al turista unas casas y algunas mezquitas diseminadas llenas de polvo y con un
paisaje montañoso ,peculiar, que no reviste una hermosura de alucinar ,la ida y regreso
seria un paisaje agradable ,vuelvo a repetir, sino fuese por el mal estado de la ruta,
Montse y yo investigamos en una cooperativa de mujeres que venden productos de la
Argania y vemos árboles frutales que vende un hombre al lado del cauce del seco río.
Valentín compra dos para llevarse y probar suerte en su chalet Valenciano.
Regresamos dirección Agadir por la horrible carretera, al final el piso se arregla pero la
carretera tan estrecha que yo no disfruto del camino y precioso paisaje
Algo maravilloso se nos brinda Tioulit o Touliet llamado de las dos maneras se puede
decir, un pueblo en una meseta realmente soberbio
Se nos va haciendo de noche mientras llegamos cerca de Agadir, donde encontramos la
dirección de Taroudant, con un trozo nuevo de autovia que no conocíamos, se hace de
noche, pierdo ver ponerse el sol en las murallas de Taroudant, algo de los paisajes
marroquíes que no se deben perder., yo prefiero este atardecer al de Zadar, que se dice
el más bello del mundo
Día 13 Sidi Ifni - Taroudant
Enrique, contentísimo porque adora esta ciudad reino de la dinastía Saadiana y ocupada
por los almorávides en el mil y pico,
Se dice que esta ciudad se edificó para luchar contra los portugueses que ocupaban
Agadir, leyenda porque es una ciudad con vestigios anteriores a esta fecha.
Acampamos en las murallas cerca de las acequias de agua que bajan de los altos montes
de la cordillera próxima, donde el Touscal el pico mas alto de Marruecos se yergue
majestuoso. Sin hacernos caso Valentín y Montse, van a dar una vuelta y al día
siguiente nos comentan que al atravesar las murallas se encuentran sin luz y ante la
inseguridad deciden volver, maravilloso, porque así yo recorreré los múltiples zocos
para hacer compras con mi amiga
Día 14 Taroudant Ait Ben Haddou
Por la mañana desayuno con jeringo delicioso, compras por la medina ,que también se
dice “una Marraquech en pequeño”, la gente es maravillosa ,el Sous ,guarda en sus
habitantes un encanto especial que no tienen otras regiones marroquíes ,la industria por
excelencia es la zapatería ,hay miles de babuchas y sandalias con unos diseños que para
si quisieran muchas boutiques europeas, y de cómodas ,ni cuento ,compro varias para
regalos y unas para mi ,que dicho sea de paso no me he quitado en todo el verano ,y que
al final de este Enrique me regañaba por llevarlas porque estaban ya destrozadas, pero
me niego en redondo ,era flotar ,como si fuera descalza ,hasta que un aciago día fui a
buscarlas y el día anterior Enrique las depositó en la basura y así terminó la historia de
mis comodísimas sandalias compradas en Taroudant por 10 euros
Pues voy a volver la próxima Semana Santa para comprarme por lo menos cinco pares
Valentín amplia su colección de collares adquiriendo otro par o tres de ellos, no lo sé.
A pesar de lo muy a gusto que estamos, ellos tienen prisa para marcharse ,porque ,cosa
de abuelos ,han de quedarse con su nieta y se les acaba el tiempo ,a pesar de que no nos
apetece separarnos ,pero llegando a Ouarzazate se marcharan para desembarcar en